El seleccionado masculino Junior de handball perdió 28-21 ante los europeos en el Mundial de Bosnia-Herzegovina. Para clasificarse a la próxima ronda, este sábado, el combinado nacional deberá vencer al conjunto local. Federico Mihail, arquero browníano atajó 25 minutos. "Tuvimos bastantes errores y lo pagamos caro", analizó en diálogo con De Brown.
La Selección Junior de handball cayó por siete ante Hungría (28-21) y ahora está obligada a ganarle al anfitrión para pasar a segunda ronda en el Mundial de Bosnia y Herzegovina.
Argentina comenzó arriba en el marcador tras haber anotado primero pero luego los húngaros tomaron ventaja y se pusieron 5-1. El conjunto de Guillermo Milano pagó caro los errores y tuvo que remarla desde atrás. Luego llegó a empatar las acciones en 11 pero los europeos fueron más sólidos sobre el cierre del primer tiempo, que se fueron al descanso 14-12 en ventaja.
En el complemento Hungría consiguió otro parcial de 5-0 y daba la impresión que la historia se liquidaba; pero el combinado nacional no se dio por vencido, apareció Santiago Baronetto y la Argentina quedó a dos a falta de siete minutos. Sobre el final, ocurrió lo mismo que en la primera parte, el conjunto europeo fue más efectivo y se llevó la victoria por 28-21.
Federico Mihail, arquero de la Sociedad Alemana de Gimnasia Almirante Brown (SAGAB) estuvo presente en 25 minutos del juego teniendo una destacada actuación. “Tuvimos bastantes errores y por eso perdimos”, analizó en diálogo con deBrown.com.ar
Ahora, Argentina deberá ganarle a Bosnia y Herzegovina el sábado para poder avanzar a los octavos de final de la Copa del Mundo. “Tenemos 48 horas para recuperarnos y pensar en los locales. Va a ser un partido a full que hay que jugarlo desde el minuto cero”, concluyó Mihail.
