Se trata de dos estaciones de servicio que se encuentran una enfrente de la otra y pertenecen al mismo dueño. El último de los asaltos fue uno de los más violentos. A punta de pistola, motochorros amenazaron a los presentes. Los empleados temen por su seguridad. Mirá el video.
Dos estaciones de servicio de Burzaco fueron blanco en el último mes de seis robos. Ambas pertenecen al mismo dueño y están localizadas una enfrente de la otra. En la mayoría de los casos, motochorros armados asaltaron a los empleados y clientes.
El último de los hechos tuvo lugar el pasado miércoles en la petrolera, sita en Av. Monteverde 3552. Alrededor de las 19, dos delincuentes ingresaron al playón y, a cara tapada, amenazaron a los presentes.
“Me agarró a mí, me empezó a insultar, me sacó la plata y después fue directamente a mi compañera. Le dijo: ‘Vení zorra para acá’, la empujó y le arrancó la riñonera, siempre apuntando a todo el mundo”, contó Carlos, uno de los empleados, en diálogo con www.deBrown.com.ar.
Los ladrones también intentaron robarle a uno de los clientes que se encontraba en su camioneta, pero no tuvieron éxito.
“En un momento uno de ellos se me cruza enfrente, me empieza a insultar de nuevo y me pone el arma en la nuca. Yo ahí dije: ‘Ya está o me pega una piña o un tiro’. Te quedás inmóvil”, agregó.
La secuencia duró menos de un minuto y quedó grabada en las cámaras de seguridad de la estación. Finalmente, los motochorros se dieron a la fuga con el botín.
“Cuando ya se estaban alejando de nosotros, empezamos a gritar que nos habían robado, y nos apunta devuelta a todos con el arma y dispara un tiro al aire. Ahí se me aflojaron todas las piernas”, agregó. Afortunadamente no se registraron heridos.
Las denuncias fueron radicadas en la Comisaría N° 2 de Almirante Brown. Asimismo, los empleados se reunieron ayer con un representante del Centro de Operaciones Municipal (COM) y la Policía para intentar llegar a una solución.
*Otro de los asaltos ocurridos en la estación de servicio
“Es horrible ir a trabajar ahí. Ya escuchamos una moto y miramos para todos lados, no queremos atender. Cuando comienza a oscurecer ya nos ponemos nerviosos porque nos pueden venir a robar”, expresó a este medio.
