La “Joya” de Burzaco cerró el mejor año de su carrera. Comenzó en Jaguares y se afianzó como titular indiscutido de Los Pumas.
Con tan sólo 21 años, Bautista Delguy se convirtió en la cara visible de la renovación del rugby nacional. Nació y dio sus primeros pasos en las canchas de Pucará, donde desde las divisiones menores ya demostraba ser distinto.
El eléctrico fullback cerró el 2017 con un duro golpe tras no poder llegar a la final del TOP 12 con su club. Pero el futuro le tenía preparado un 2018 que, de seguro, jamás olvidarán ni él ni los amantes del deporte.
Llegó a Jaguares -la franquicia argentina- en enero sólo para entrenar bajo las ordenes de Mario Ledesma. Apenas le bastaron dos entrenamientos y un partido amistoso para eclipsar al Head Coach y ganarse un lugar en la gira. Allí, la “Joya” demostró sus condiciones y marcó sus primeros puntos.
El Súper Rugby estaba a la vista y claro, Delguy ya se frotaba la manos. Cumplió y con creces. Junto a Bofelli, crearon una dupla sensacional y terminaron como tryman del plantel, ambos con 9 zambullidas en el ingoal. En cada partido, el de Burzaco era cada vez más importante.
El SR fue un trampolín hacía la gloria. Consiguió sus primeras citaciones a Los Pumas, el seleccionado argentino, máximo objetivo para cualquier jugador de esta actividad.
Casi en un abrir y cerrar de ojos, seis meses después de su último partido con Pucará debutó con la “Albiceleste” frente a Gales. En su segundo encuentro marcó un try como mejor carta de presentación.
Con el Personal Rugby Championship, Bautista le puso punto final a un 2018 cargado de metas cumplidas. Disputó ocho juegos entre amistosos y oficiales, y marcó cuatro tries. La mejor actuación fue frente a los Springboks en la victoria histórica 32-19 en Mendoza.
Con contrato vigente hasta 2021 con Jaguares y con Los Pumas como objetivo, el 2019 será igual en cuanto a intensidad.
