A Gabriel y Pablo Guevara, los dos hermanos acusados y detenidos, se podría sumar una tercera persona. La Justicia tiene pruebas de que el cuñado de la victima viajó la madrugada del asesinato de Guernica a Longchamps, pero no lo hizo solo. Esta semana se prevé una nueva ronda de declaraciones. Aún se aguarda el informe de ADN del cuerpo.
Una nueva pista cambia el rumbo de la investigación por el femicidio de Marcela Coronel, la enfermera de 33 años que fue hallada muerta en su casa el 28 de mayo.
Según voceros judiciales, los informes obtenidos revelan que Pablo Guevara -cuñado de la víctima- viajó de Guernica, donde tiene su casa, a Longchamps, donde vive su hermano Gabriel.
Pero un dato llama la atención: no viajó solo. Con su tarjeta SUBE sacó dos pasajes. Por eso se considera la participación de una tercera persona que habría ayudado a limpiar la escena del crimen y mover el cuerpo.
Este dato coincide con la declaración de Pablo realizada el lunes, donde explica que Gabriel lo llamó y le pidió ayuda. “Me mandé una cagada, ayúdame”, habría expresado el marido de Marcela en la conversación.
La fiscal Marcela Juan aguarda todavía los resultados del ADN sobre el cuerpo de la víctima. Espera además informes sobre cruzamientos de llamadas telefónicas y se prevé una nueva ronda de declaraciones la próxima semana.
Gabriel está acusado de “Homicidio triplemente calificado” por vínculo, femicidio y alevosía. Pablo quedó imputado por el delito de “Homicidio agravado por alevosía”.
