El ex jugador del Real Madrid donó materiales de entrenamientos y aconsejó a los pequeños.
Nació en Adrogué y enamoró al mundo entero con su forma de jugar al fútbol. Pasó por Argentinos Juniors, Tenerife, Real Madrid y Milán de Italia, pero Fernando Redondo no cambió la humildad que siempre lo destacó. Aceptó el pedido de Hernán Verón, vecino del barrio, y visitó Don Orione para sorpresa de todos.
El browniano, destacado como uno de los mejores del mundo en su momento, se presentó en la escuelita ubicada en la manzana 33 de dicha localidad. La institución alberga cerca de 20 chicos que entrenan y meriendan. El lugar no tiene como fin la competencia, sino brindarles contención.
Redondo donó pelotas profesionales de fútbol, juegos de pecheras y conos para entrenamiento. Charló a corazón abierto, aconsejó a los niños y contó sus experiencias en cada uno de los clubes que se desempeñó. Además, se sacó fotos y firmó autógrafos a todos los presentes.
En su época como jugador, Fernando recogió elogios de todos. El mismísimo Alex Fergusson afirmó que “tenía imanes en sus pies”. Debutó en Argentinos Juniors, pero su punto más alto fue en el Real Madrid y Milán.
Ganó 3 Champions League; Supercopa Europea; Copa Internacional; dos Ligas Españolas; Supercopa de España; Copa de Italia; Supercopa de Italia; y Serie A. Además, salió campeón con Argentina en el Campeonato Sudamericano Sub 17; Copa Confederaciones 1992; y la Copa América 1993.