Lo notificó el INDEC. Para el IPC-Congreso, fue del 2,1; mientras que para los gremios se incrementó 2,4 puntos. En los últimos 12 meses, el costo de vida se encareció un 27 por ciento.
El último informe difundido por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) ratificó que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) continúa en alza, al contrario de los pronósticos del sector privado.
En abril, la inflación oficial aumentó un 2,6 por ciento con respecto al mes anterior. Además, el indicador acumuló un 9,1 por ciento en los primeros cuatro meses del año y 27,5 por ciento interanual, según el organismo público.
Las principales subas se detectaron en las categorías “Indumentaria” (5,1%); “Vivienda y Servicios Básicos” (4,6%), debido al impacto del alza en las tarifas de la luz y el gas; y “Educación” (3,2%). En tanto, “Alimentos y Bebidas” lo hizo en un 2,2 por ciento.
El IPC-Congreso, que elaboran legisladores de la oposición en base a estimaciones de consultoras privadas, marcó una aceleración del 2,1 por ciento; con un acumulado de 8,3 por ciento en el primer cuatrimestre de 2017; y un acrecentamiento del 27, 3 por ciento en 12 meses.
De esta forma, el indicador evidenció su tercer mes consecutivo por encima del 2 por ciento y un promedio del 1,9 por ciento en el último semestre. Además, informaron que desde enero de 2016, los precios ascendieron un 57,8 por ciento.
Por su parte, El Instituto Estadístico de los Trabajadores (IET), que lleva adelante la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET) notificó que la variación fue del 2,4%, a causa de la acentuación en el rubro “Vivienda”.
Sumado a esto, desde la entidad estiman que en los últimos 17 meses se perdió el monto correspondiente casi a un salario. "La pérdida acumulada del salario real desde noviembre de 2015 equivale a un 95% del haber mensual", advirtieron.
En este marco, los estratos más humildes y vulnerables son los más perjudicados. Una medición del área de Tercera Edad de la Defensoría de la Ciudad reveló que un jubilado precisa 16.134 pesos en mayo para cubrir la canasta básica, por lo que hay un 70 por ciento que no pueden cubrir sus necesidades primarias.
En mazo, una familia tipo necesitó 14.090,52 pesos para no caer por debajo de la línea de la pobreza; y 5.798,57 pesos para superar el nivel de indigencia. Los valores corresponden a los que se definen en la Canasta Básica Total (CBT) y Canasta Básica Alimentaria (CBA).
Ante la nueva oscilación de abril, el panorama desmejorará de manera inminente si se tienen en cuenta los últimos estudios del Centro de Estudios Sociales y Acción Comunitaria (CESyAC). Para la institución, una familia tipo requiere unos 1000 pesos diarios para vivir en CABA y las zonas aledañas.
El sondeo toma en cuenta los consumos de un grupo familiar que alquila la propiedad donde vive; y otros gastos típicos de una familia de clase media que no están ponderados en las mediciones más conocidas; de lo que resultó la suma de 32.442,44 pesos mensuales.
