Con el fin de detectar irregularidades en las operaciones comerciales que se concretan a través de sitios web, investigará las transacciones virtuales con páginas nacionales e internacionales. Según informaron oficialmente, en los últimos meses se registro una fuerte fuga de dólares por esta vía.
La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) intensifica una vez más los controles sobre la compra-venta de productos en el exterior. En esta ocasión lo hace de forma más general, ya que investigará las operaciones que se concreten a través de Internet en sitio web nacionales e internacionales.
Los objetivos principales son detectar irregularidades, controlar la fuga de dólares, e identificar posibles casos de contrabando de artículos que ingresan al país.
Los operativos de control estarán a cargo de 100 inspectores, quienes rastrearán las direcciones de la web en donde se venden distintos tipos de elementos y dónde se realiza la entrega de mercadería. Buscarán que las transacciones con tarjeta y/o en efectivo sean correctas desde ambas partes, los que compran y los venden.
De esta manera, los agentes tendrán suficiente información para conocer si los locales funcionan en regla, podrán detectar si en algunos casos se comercializan bienes que entrar por contrabando y si su situación fiscal se encuentra en orden.
Datos
Según cifras oficiales difundidas en las últimas semanas, en 2012 el crecimiento del comercio electrónico fue exponencial y sumó $16.700 millones. Esto marcó un salto de 539% desde el 2007.
El avance de esta temática de compra, que responde a los cambios tecnológicos que se van inmiscuyendo en los hábitos diarios de la sociedad, le preocupa al Gobierno nacional en materia de controles comerciales.Es que las reservas del Banco Central llegaron a un nivel de u$s32.598 millones, 20 mil millones menos del récord que se había obtenido en 2011. Según transcendió, los principales canales del escape son: el déficit en la balanza energética, el turismo y las compras por Internet.
Los argumentos más comunes que dan quienes eligen una y otra vez realizar compras virtuales son, por un lado, la implementación del cepo cambiario y las trabas a las importaciones que, en muchos casos, los dejaron esperando por meses un artículo nuevo o un repuesto, a través de la compra clásica en un local a la calle; y, por el otro, las diferencias de precios que llegaron a conseguir en el extranjero.
Una de las operaciones que utilizan los usuarios es a través del “free shipping” (envío gratuito) que -incluso pagando algunos dólares por el servicio y sumándole el 20% de la AFIP- consiguen ofertas en sus productos a buen precio. Durante los últimos meses, estos procedimientos generaron una saturación de envíos internacionales. Incluso algunos servicios de correo decidieron dejar de llevar los paquetes y sólo dejar en los domicilios una nota para que el comprador pase por una oficina cercana a retirar la encomienda.
Sin lugar a duda es una nueva forma de adquirir productos y forma parte de la globalización que sigue avanzando a pasos agigantados en el ámbito comercial con Internet como vía rápida de acceso. Algunos informes mencionan a China y a Estados Unidos como los dos país desde los que más productos llegan a la Argentina a través del fuerte requerimiento de los compradores web.
