El púgil nacido en José Mármol noqueó en el primer round a Martín Ruiz, en San Juan, y se adjudicó el cinturón WBA- FEDEBOL peso welter. Cerró el año con un récord de 14 peleas ganadas y ninguna perdida.
Después de derrotar a Chávez en noviembre, Jeremías Ponce viajó a San Juan en busca de su primer título profesional. En frente lo tenía al oriundo de Mar de Ojo, pero no fue rival para la topadora de Mármol.
El joven browniano, de apenas 21 años, dio que hablar durante el 2017, temporada en la que no conoció la derrota. Debutó en 2015 y cuenta con 14 peleas ganadas, 9 por KO y ninguna derrota.
Vestido de dorado y blanco, Ponce ingresó con la música de Jon Z y Baby Rasta de fondo. Pisó el ring sabiendo que era su oportunidad que tanto esperó para calzarse el cinturón tan deseado. Ya en el rincón rojo, se preparó y salió por todo.
Fue un huracán. Ruiz intentó en los primeros segundos, pero el púgil de Zacarias no tuvo piedad. Conectó primero con un gancho de izquierda directo al hígado. El golpe dejó secuelas en zona hepática del de Mar de Ajo y el browniano lo aprovechó.
No lo dejó reaccionar y con un uppercut impactó de lleno en la cara de su rival, que cayó sin reacción. Una serie de golpes certeros terminaron con la pelea en apenas sólo 1 minuto y 15 segundos. Con el KO consumado, “Jere” festejó la obtención del cinturón WBA- FEDEBOL peso welter.
En noviembre, el boxeador nacido en José Mármol se quedó con el triunfo de una forma inesperada. Le bastó apenas unos segundos para noquear a Chávez. Ponce conectó un derechazo directo que rompió cualquier defensa que el de San Miguel pudo presentar.
El browniano logró superar rápidamente lo que, en principios, iba a ser una de las peleas más difíciles del año.
