Un joven de 21 años fue detenido en Corrientes, luego de confesarle a un sacerdote su participación en el asesinato del inspector de Longchamps, ocurrido en septiembre del 2016.
Cinco meses después del homicidio de Carlos Fabián Molero, las autoridades dieron con el ejecutor. Se trata de Kevin Magdalena, de 21 años, quien se encontraba recluido en Corrientes.
El delincuente se entregó en Goya, tras ser convencido por un sacerdote, a quién le reconoció su responsabilidad en el crimen del uniformado.
En estos momentos, Magdalena está retenido en la Unidad Penal N° 8 perteneciente al Servicio Penitenciario de la provincia del Norte, a la espera de los trámites correspondientes para efectuar su traslado hacia Buenos Aires.
La muerte de Molero ocurrió el 8 de septiembre de 2016 en un intento de robo en un supermercado chino ubicado en la Avenida Hipólito Yrigoyen y Roger, en Longchamps. Se desempeñaba en la División Materiales y Bienes de la ex Policía Metropolitana.
De acuerdo al registro de las cámaras de seguridad del local, dos delincuentes armados ingresaron y uno de ellos tomó como escudo humano a un cliente mientras que el otro se acercó a la línea de cajas para robar el dinero. Molero estaba de franco y se encontraba en el lugar, vestido de civil junto a su hija, cuando decidió intervenir para evitar el robo y extrajo su arma reglamentaria.
Tras identificarse se produjo un tiroteo con los delincuentes. Dos de ellos murieron a pocos metros del local producto de los disparos, cuando intentaban escapar en la Citroen Berlingo robada en la que se trasladaban. Molero se asomó a la puerta del supermercado con el objetivo de evitar la fuga de los asaltantes pero recibió un disparo mortal en la frente por parte de otro agresor que obraba como “campana”.
Dos ladrones pudieron escapar del lugar corriendo y entre ellos se encontraba Magdalena, informaron fuentes. Por este motivo, el malviviente tenía un pedido de captura ordenada por la Justicia de Lomas de Zamora.
