Lo expresó Nicolás Tagliafico, lateral de Independiente. En diálogo con De Brown, analizó la nueva edición del clásico de Avellaneda. El “Rojo” goleó a Racing por 3 a 0 y el oriundo de Rafael Calzada fue una de las figuras.
El fin de semana se jugó la “fecha de los clásicos” en la Primera División del fútbol argentino. Uno de los más destacados, fue el que disputaron Independiente y Racing en el estadio Libertadores de América.
Terminó en goleada 3-0 a favor de los dirigidos por Mauricio Pellegrino, quiénes lograron estirar la superioridad con el rival del barrio a 23 partidos de ventaja. Acumulando, además, 14 años sin perder en su cancha ante el mismo. La última victoria de la “Academia” en Alsina y Bochini, fue en el año 2001.
Una de las mejores actuaciones individuales que tuvo el encuentro fue la de Nicolás Tagliafico. El lateral izquierdo, vecino de Calzada y surgido de las divisiones menores de Banfield, jugó uno de sus mejores partidos con la camiseta del “Diablo” y se ganó los aplausos del público.
“Estoy muy bien, trato de ser regular. No sé si tengo una vara de lo que fui en el Taladro, pero ahora me siento óptimo. En mis comienzos, notaba que algo me faltaba. Debo seguir corrigiendo errores y apuntalar lo bueno”, reconoció en diálogo con www.deBrown.com.ar
Al contrario de lo que ocurrió en otros “derbys”, el de Avellaneda contó con un claro dominador a lo largo de los 90 minutos. Independiente, con orden, inteligencia y aptitud, avasalló a su vecino. “Se dio todo. Desde el primer momento mostramos ser superiores, jugamos bien y fuimos contundentes de local, con nuestra gente. Estamos contentos”, expresó “Taglia”.
Y agregó: “El resultado fue reflejo del rendimiento. Intentamos por todos lados. Con el primer gol y la expulsión, fue otro partido. Fuimos a buscar el segundo y después el tercero. En otras ocasiones, dejamos escapar puntos por replegarnos. Esta vez, hicimos lo contrario y todo terminó de la mejor manera”.
Pese al gran triunfo y llevar 10 partidos invictos desde la asunción de Pellegrino, el conjunto ya tiene la cabeza puesta en el encuentro de mañana, cuando jueguen la revancha por la primera fase de la Copa Sudamericana ante Arsenal de Sarandí. “Disfrutamos del clásico pero ya pasó, ahora pensamos en lo que viene”, afirmó.
“Los torneos internacionales en este club se viven de una manera increíble y con los chicos ya nos planteamos el objetivo de pasar a octavos de final. Tenemos que manejar el desarrollo, estar metidos y mantener el nivel del sábado”, concluyó.
