El clásico más importante de Sudamérica quedó manchado por el accionar de las autoridades sanitarias de San Pablo. La intención era deportar a los cuatro jugadores nacionales que llegaron desde Gran Bretaña, hace tres días.
Se trata de Emiliano Martínez, "Cuti" Romero, Giovanni Lo Celso y Emiliano Buendia, quienes militan en la Premier League. Según los trabajadores gubernamentales, los representantes argentinos no cumplieron con la cuarentena de 15 días tras ingresar al país.
Iban 5 minutos del compromiso cuando irrumpieron dentro de campo de juego con la clara intención de suspenderlo. Tras un confuso revuelo, Messi y compañía se fueron a loa vestuarios y pocos minutos después se confirmó la finalización del duelo.
"Es todo muy triste. No era el momento para hacerlo porque en ningún momento se nos avisó que no podían jugar. Somos los damnificados", sostuvo Lionel Scaloni, DT de Argentina tras la suspensión.
Argentina llegó desde Caracas a San Pablo hace tres días. En las últimas horas, las autoridades avisaron que cuatro de ellos no habían incluido en la Declaración Jurada haber estado en Reino Unido (desde AFA lo desmienten) y debían cumplir la cuarentena.
Sin embargo, desde Conmebol confirmaron que los jugadores se encontraban efectuados de dicha regla por encontrarse en una burbuja sanitaria y están habilitados para el evento. Papelón mundial...
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— Noticias De Brown (@debrownweb) September 5, 2021
