Se trata de Gonzalo Rielo, vecino de Claypole. Su obra incluye 40 piezas que hacen foco en la situación de encierro. “Sentía que una crisis de esta magnitud iba a ser algo recordado en el tiempo”, confió a De Brown.
Un mundo aislado por un virus desconocido, podría ser una trama sacada de una película de ciencia ficción. Sin embargo, es el escenario que nos presentó este 2020 y aún estamos transitando.
Para muchos fue un momento disparador para crear y potenciar la imaginación. Este fue el caso de Gonzalo Rielo, un artista de Claypole que lanzó su primer libro de poesías basado íntegramente en esta experiencia insólita.
“Moho” cuenta con 40 piezas que enumeran reflexiones, ideas y catarsis sobre la situación de encierro en tiempo de pandemia. Se plasma el hastío, el insomnio y el pánico. También la perplejidad, la violencia de género y la incertidumbre. Es un trabajo de experimentación visual y espacial.
“Surge por la necesidad de transmitir mi opinión de lo que venía pasando. Sentía que una crisis de esta magnitud iba a ser algo recordado en el tiempo. Se me vino la idea de empezar a escribir mi percepción de lo que veía y fueron surgiendo algunos poemas, después empecé a darles una estructura”, explicó su autor en diálogo con www.deBrown.com.ar
La idea original fue pensar el libro como un diario de cuarentena que hable de la situación de encierro durante ese lapso y todo lo que eso conlleva. Por este motivo, la publicación contiene una pieza por cada día de aislamiento. “Lo había sido pensado en un lapso de 40 días, pero todo se extendió y hoy tenemos más de 180”, admitió.
Otro de los rasgos distintivos lo marca su estructura. La obra inicia con el último poema -el N°40- y sigue de forma decreciente hasta llegar al primero. “Va de atrás para adelante”, aseguró a este medio.
Casualmente, una filtración de agua empezó a dañar una pared del departamento que habita el artista browniano. Con el paso de los días, notó que esa humedad era cada vez más intensa y se transformaba en una mancha que arruinaba y gangrenaba la superficie.
“Comencé a ver ese proceso de putrefacción y a notar que había algo en común: yo también me iba pudriendo de estar encerrado. Entonces me pareció bueno hacer esa analogía entre la pared y el ser humano porque es lo que hoy estamos transitando”, confió Gonzalo sobre el momento de pensar el título.
También reconoce que la morfología y composición de las letras que integran la palabra “Moho” lo atrajeron. “Era algo que tenía que ver con lo que quería decir. La M, conformada por tres ángulos filosos, cortantes y violentos. Luego un circulo, armonioso, perfecto y orgánico. Una H como dos paredes separadas por una tensión horizontal inorgánica y asonante. Y finalmente otra O en armonía sonora y agradable”, describió.
Y agregó: “La estabilidad entre la dureza y la ternura, lo sensible y la antipatía, la cordura y la locura; esa lógica también está incrustada el ser humano”.
Gonzalo Rielo, tiene 32 años y es vecino de Claypole. Es artista plástico, ilustrador y profesor de artes visuales especializado en pintura, grabado y escultura.
Expone desde el 2009 de manera individual y colectiva. Fue catalogado por el Conicet, junto a 60 artistas argentinos de renombre, por la implementación de nuevas técnicas y tecnologías.
Su pasión por crear y componer lo conducen a la poesía. “Es un lenguaje expresivo, algo que tiene que ver más con lo estético. Es la rama que más estudié y más me gusta. El libro en este punto tiene mucho que ver con lo visual”, agregó.
