La Agencia Nacional de Discapacidad canceló el monto correspondiente a cuatro meses. Todavía queda un saldo de tres.
El Pequeño Cottolengo de Don Orione había informado hace una semana que peligraba la continuidad del establecimiento que funciona desde 1935. Es que hacía siete meses que el Programa Federal Incluir Salud había dejado de abonar los servicios de atención. Sin embargo, gracias a su lucha, su reclamo fue finalmente escuchado.
“Hemos recibido la cancelación efectiva de las prestaciones de discapacidad correspondiente a los meses de febrero, marzo, abril y mayo por parte de la Agencia Nacional de Discapacidad”, informó el miércoles la institución a través de un comunicado.
Asimismo, resaltaron que las autoridades del Programa se comprometieron a cancelar el abono de los servicios con "regularidad”. De esta maner,a asegurarán la previsibilidad y el normal funcionamiento del hogar que cuida diariamente a 370 personas.
Sin embargo, advirtieron que los aranceles de las prestaciones brindadas se encuentran “desactualizadas.” A pesar de ello, la institución ha podido cumplir con la obligaciones laborales correspondientes de agosto.
El Programa Federal Incluir Salud da cobertura médico-asistencial a todos aquellos titulares de pensiones nacionales no contributivas. Había suspendido el traspaso de los recursos durante varios meses, lo que afectó a cientos de instituciones alrededor de todo el país.
“No se trata de un subsidio que nos da el Estado. La ley 24.901 establece como obligatorio por parte de las obras sociales y, en este caso por Incluir Salud, de pagar los servicios de atención a estas personas. Es un derecho”, había explicado Beatríz Peréz, coordinadora técnica del hogar, en diálogo con www.deBrown.com.ar.
La institución fue fundada en 1935 por el sacerdote Luis Orione. Se trata de un hogar terapéutico que cuida de personas con distintas discapacidades. Algunos de los pacientes no tienen familia y este lugar es su único resguardo.
El staff está compuesto por cerca de 400 trabajadores. Está integrado por médicos, psicólogos, trabajadores sociales, kinesiólogos y enfermeros. También lo componen empleados del servicio de limpieza y mantenimiento.
