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SOCIEDAD
domingo 18 de marzo de 2018

Por el uso del celular, el 33% de los adolescentes tendrán miopía en 2020


Lo reveló el Instituto de la Visión de Buenos Aires. El problema radica en que el ojo de los jóvenes todavía se encuentra en crecimiento. Su exposición frecuente y prolonga a las pantallas móviles genera consecuencias. El cansancio visual y los ojos secos son la previa de esta problemática. Consejos de especialistas para prevenirlo.

Primero era la televisión, luego la computadora y ahora todo se reduce al celular. En ese pequeño aparato telefónico, los jóvenes podrán encontrar desde el uso de las redes sociales para comunicarse con sus pares hasta la posibilidad de escribir un trabajo práctico.
Sin embargo, la exposición prologada a la pantalla puede causar un gran perjuicio. Según el Instituto de la Visión de Buenos Aires, el 33 % de los adolescentes tendrá miopía por “la utilización inadecuada de dispositivos móviles".
El motivo de esta problemática es que, a diferencia de los adultos, en esta etapa la vista se encuentra en pleno desarrollo. Según los profesionales, “todos los chicos son hipermétropes”. Esto significa que su ojo es más corto que el de una persona mayor. Por lo tanto, los estímulos que reciban en este período serán determinantes para su visión.
El espacio entre los jóvenes y el dispositivo es mínima. El uso y abuso constante del celular genera que la persona se acostumbre a ver a una corta distancia. De esta manera, se genera la “miopía”, que no es otra cosa que la visión poco clara de los objetos distantes.
"Al mirar el celular se utiliza la acomodación, se contrae el músculo ciliar, unido al cristalino, y permite que las distancias lejanas se enfoquen de cerca. El ser humano no está preparado para estar todo el día 'acomodando' o mirando de cerca. Cuando miramos de lejos, relajamos la vista", explicó Fernando Giusio, oftalmólogo del Hospital Italiano.
Otra de las consecuencias que esta práctica puede traer aparejada es el “ojo seco”. Al estar tan pendientes de lo que ocurre en la pantalla, los adolescentes no parpadean lo necesario. Ésto también lleva a que presenten “astenopia”, es decir, cansancio visual.
 

Consejos

La principal recomendación para los adolescentes es que sigan la regla del “20-20-20”. Esto significa que después de estar 20 minutos frente al dispositivo, observen un objeto a 6 metros de distancia (20 pies). Esta práctica debe realizarse durante 20 segundos, intentando parpadear lo más posible.
Asimismo, resaltan la importancia de alternan las pantallas con juegos o actividades al aire libre. Una práctica que además es importante a nivel físico.
Si bien la advertencia va dirigida hacia los jóvenes, los más chicos no están exentos de esta problemática. Los nativos digitales nacen prácticamente entendiendo el lenguaje del celular y muchos padres lo incorporan como herramienta esencial en las vidas de sus hijos.
Según la Academia Americana de Pediatría, hasta los 18 meses de edad, los pequeños deberían estar alejados de este tipo de aparatos. Excepto en casos como las videollamadas, donde tiene la posibilidad de interactuar con familiares que se encuentran a una larga distancia.
En el caso de los mayores de dos años, recomiendan que "no se les permita llevar a la cama un dispositivo luminoso antes de dormir". Además, indican que no permanezcan más de dos horas frente a la pantalla. Sin embargo, reconocen que el uso de estas herramientas es fundamental para el desarrollo cognitivo de los menores.
 

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