El 30 de octubre de 1983 se recuperaba la voz del pueblo, con una histórica elección que llevó a Raúl Alfonsín a la Presidencia. "La gente celebró esta nueva etapa, quería terminar con el proceso militar y que nunca más volviera un gobierno que no sea electo por voto popular", expresó Felix Flores, primer intendente de la era democrática.
La historia de la Argentina está esculpida a fuerza de cambios, momentos dolorosos y la aparición de protagonistas que potenciaron esas modificaciones en los rumbos del país. Se cumplen hoy 30 años de la vuelta a la democracia. El 30 de octubre de 1983 el pueblo volvía a hacerse escuchar a través de las elecciones, que erigieron a Raúl Alfonsín como ganador, como el primer presidente democrático luego de la más sangrienta dictadura militar que vivió esta nación.
Pasaron tres décadas desde aquel acontecimiento que marcó a fuego a la argentina, pero el recuerdo sigue latente. El privilegio del pueblo de hacerse escuchar por intermedio de las urnas, es actualmente un derecho que los argentinos valoramos con cada acto eleccionario. Nos toca de cerca este sentimiento, habiendo pasado tan sólo tres días desde la celebración de las Legislativas, un momento para mirar hacia el pasado y mantener viva la memoria, pero también para proyectar al futuro y seguir defendiendo la democracia que tanto costó, pero que también tanto festejamos.
"Por aquel entonces, la gente estaba en fiesta de democracia, quería terminar con el proceso militar y es por eso que se forma en el país la multipartidaria, una agrupación conformada por todos los políticos (...). El objetivo era seguir fortaleciendo los cambios y que nunca más vuelva un gobierno que no fuera elegido por el pueblo", expresó en diálogo con www.deBrown.com.ar Felix Flores, el primer intendente de Almirante Brown desde la vuelta de la democracia.
El peronista Flores fue electo aquel 30 de octubre y asumió el 10 de diciembre de 1983. Recordó cómo recibió el distrito y la responsabilidad que ello le demandó, ya que una nueva etapa merecía también medidas que modificarán la vivencia de los ciudadanos, que ahora contaban con la libertad de expresarse. "Durante los años previos al 83, habíamos peticionado la convocatoria a elecciones para instaurar la democracia y lo logramos. En ese lapso tuve el honor de que en Almirante Brown me propusieran como candidato a intendente municipal y fui el primero en asumir en la democracia", expresó.
"Los primeros días a cargo del distrito fueron muy difíciles. Encontré una municipalidad con muchos problemas económicos, no había plata ni ningún elemento para ayudar a los vecinos. Tal es así que a los pocos días de haber asumido hubo una gran tormenta y los ciudadanos quedaron sin techos y nosotros sin plata. Tuve que recurrir a los depósitos y hasta comprar cosas 'a fiado'. Era evidente que había que empezar de cero todo tanto lo ideológico como lo material", sostuvo.
Los desaparecidos, una cuenta pendiente
Pasados los años de dictadura el reclamo se hizo cada vez más fuerte en la boca de Madres y Abuelas de Plaza de Mayo; y en todo el país la sociedad respaldó, acompañó y ponderó el pedido de información sobre el paradero de los miles de jóvenes desaparecidos durante el proceso cívico militar. La libertad de expresión llegaba como una bocanada de aire fresco que manifestada todo el dolor y las consecuencias que había dejado el gobierno de facto.
"Yo nunca prometí nada, solamente mi primer acto de gobierno expresé que estaba comprometido con la búsqueda de los 30 mil desaparecidos, así fue que la municipalidad de Almirante Brown abrió las fosas comunes, en el cementerio de Rafael Calzada, y encontramos una gran cantidad de cadáveres de desaparecidos, de los cuales muchos fueron identificados y aún hoy hay algunos de los que se desconoce su identidad", rememoró ante este medio.
Así, de a poco, comenzaban a aparecer los evidentes destrozos a nivel social, político y económico de un gobierno nacional que se llevó por delante los derechos de los ciudadanos. "Con el correr de los años, se fue fortaleciendo la democracia y sucedieron los gobiernos, algunos que tuvieron éxitos, otros no, y otros fueron regulares… pero todo colaboró para que hoy esta democracia esté fortalecida y se respete la voluntad popular", expresó Flores.
La asunción local que dejó una huella
"Señores peronistas, radicales y de todos los partidos políticos, hemos reconquistado la democracia para nosotros y todo el país, trabajemos juntos para fortalecer la misma y buscar la felicidad del pueblo (...)". Así inició el primer discurso del ex intendente local aquel 10 de diciembre del '83. Una fiesta que se vivía en toda la Argentina, un nuevo renacer de los ideales y de la política que también tenía su lugar en Brown.
"Recuerdo que estaba toda la dirigencia política de diversos espacios y todos teníamos el mismo objetivo: defender la democracia. Dije eso y así fue que fui secundado con gente no peronista, tenía al gobernador Armendáriz en la Provincia, el presidente Alfonsín. Muy a menudo nos encontrábamos para hablar y con grandeza buscar las mejores decisiones que beneficiarán al pueblo. Fueron cuatro años de gobierno, que hemos transitado con mucha felicidad y buscando el encuentro", manifestó.
La democracia que trasciende los tiempos
El pasado históricamente demostró cómo los episodios muchas veces se suceden de manera cíclica en los países. Sin embargo, la conciencia de derecho, el valor de la decisión y, sobre todo, el poder de elegir, son tres elementos que se desprenden de la democracia y que difícilmente se pueda perder, mientras una sociedad esté realmente convencida de qué es lo mejor para crecer y para salir adelante.
"El pueblo aprendió a votar, a respetarse recíprocamente. Si bien hay distintas líneas políticas, en el fondo, cuando se trata de fortalecer la democracia hay un encuentro de dirigentes que se enfocan en un mismo objetivo", concluyó Flores. Es por eso que lejos de las banderas políticas, hoy es un día que llega a los corazones de todos y que trae a memoria épocas pasadas y el recuerdo de quienes ya no están y de quienes lucharon por esta democracia.
Nota: Priscila Paolasini
Producción: Romina Benegas