El dato fue difundido por la Organización Mundial de la Salud (OMS). A su vez, estiman que 2.6 millones de bebes nacen muertos. La mayoría de los casos son evitables.
De las 130 millones de mujeres que dan a luz cada año en el mundo, 303.000 mueren durante el alumbramiento. Mientras que, 5,3 millones de niños no llegan a cumplir el primer mes de vida.
En general, según la organización internacional, los fallecimientos de madres y recién nacidos suceden en las 24 horas siguientes al parto, a pesar de que muchos de ellos podrían no ocurrir si contaran con la asistencia médica necesaria.
A través de un comunicado, la OMS explicó que complicaciones que se detectan son: hemorragias postparto, las infecciones, las obstrucciones, la asfixia en el alumbramiento o la preeclampsia, la cual se caracteriza por afecciones como la hipertensión arterial, edemas, presencia de proteínas en la orina y aumento excesivo de peso.
Este relevamiento de la entidad tiene como fin concientizar a los trabajadores sanitarios para que respeten los cuidados esenciales y estandarizados de cada parto.
Sobre ese punto, plantea cuatro momentos claves sobre los que habrá que poner especial atención: cuando la madre es admitida en las instalaciones, antes de que empiece el parto (o la cesárea), a lo largo de la hora posterior al nacimiento, y durante la hora anterior a que la madre y el niño son dados de alta.