Es un método innovador que trabaja a través del contacto entre humanos y caballos. En Almirante Brown, esta práctica funciona desde 2008 en el Centro Tradicionalista “Los Candiles” de Adrogué. El mecanismo lo emplean profesionales de la salud para tratar problemas cognitivos, neuromusculares, psicológicos y sociales, entre otros.
En sus instalaciones de Bouchard 2112, en Adrogué, este centro brinda su espacio y los caballos, para que los profesionales médicos realicen allí su actividad. Si bien estos tratamientos no son gratuitos, son más accesibles que en otro lugares dedicados a la misma temática.
En esta terapia integral, el animal se transforma en una herramienta de trabajo capaz de integrar con el fin último de que el sujeto tratado alcance una mejor calidad de vida.
El equipo de profesionales médicos a cargo de la actividad -formados en el Instituto Fleni- buscan lograr un espacio terapéutico para poder realizar trabajo por anticipación e integrar el trabajo. Para ello, plantean la idea idea que los pacientes empiecen a sentir su propio cuerpo, a conocer nuevos movimientos y sensaciones para tener mayor autonomía y a una mejor calidad de vida.
Las patologías que trabajan son variadas, entre ellas, parálisis cerebrales, lesiones del sistema nervioso o enfermedades degenerativas. Esta terapia funciona en varios niveles. Por un lado, sienten el estímulo recibido por el caballo, y por otro, todos aquellos estímulos externos que van teniendo y procesando para lograr una respuesta a nivel motriz.
El vínculo que se crea entre el caballo y los chicos sirve para transferirlo a las relaciones interpersonales en la vida diaria.