El boxeador browniano obtuvo un nuevo triunfo y continúa invicto en su camino como profesional. El pupilo de Alberto Zacarías cerró un año altamente positivo y en el 2016 comenzará a combatir a seis rounds.
En una velada organizada en la Escuela Santos Zacarías de Rafael Calzada, Jeremías Ponce se impuso en fallo dividido a Javier Ahumada, enmarcado en la categoría de los Superligeros (63,500). El oriundo de José Mármol debió apelar a todas sus variantes boxísticas para doblegar a un duro adversario.
“Fue la pelea más difícil que me tocó afrontar desde que debuté. Estoy muy contento porque me deja mucho aprendizaje y por la calidad de mi rival. Por suerte, hicimos las cosas necesarias para quedarnos con un duelo complicado”, expresó el ganador en dialogo con www.deBrown.com.ar.
Desde el campanazo inicial, Ponce trató de mantener la distancia con su jab, para no quedar expuesto a las contras de Ahumada. La potencia del hombre de Brandsen lo obligó a tomar recaudos para no ser sorprendido.
Tras los primeros segundos de estudio, el púgil browniano llegó con un par de combinaciones que le alcanzaron para adueñarse de los primeros tres minutos. Desde el rincón del local planificaron el pleito para que su pupilo marque diferencias de lejos, sin entrar en la zona de fuego.
En el segundo asalto el trámite de la contienda se emparejó y ambos peleadores intercalaron el dominio dentro del cuadrilátero. Sin embargo, lentamente Ahumada fue llegando sobre el ojo derecho del local, hasta dejarlo casi cerrado. La paridad se extendería hasta los siguientes tres minutos, dejando el resultado abierto.
En el cuarto y último round, Jeremías salió decidido a definir el combate. La calidad y potencia de sus puños, marcó la diferencia, arrinconando a su oponente contra las cuerdas en más de una ocasión.
Dos jueces establecieron que el browniano se impuso por 39 a 37 y medio; mientras que el restante, vio ganador a Ahumada por la misma puntuación.
Victoria dura y trabajada para el representante de Mármol. Sacándose de encima a un adversario peligroso, estiró su invicto, continúa mostrando crecimiento y está dando los pasos necesarios para asentarse en una de las divisiones más emblemáticas de nuestro boxeo.
“Cerré un año bárbaro y de mucha evolución en mi carrera. Di el paso hacia el profesionalismo y realicé cuatro presentaciones en tres meses. El próximo mes volveré al ring, pero peleando ya a seis asaltos, lo que significa mayor desgaste y dedicación”, concluyó.
