Este año la campaña hace hincapié en el tabaquismo como amenaza para el desarrollo de la humanidad. Es impulsada por la Organización Mundial de la Salud (OMS). El hospital Lucio Meléndez de Adrogué realizará encuentros de concientización y controles médicos durante toda la semana.
La conmemoración del Día Mundial Sin Tabaco tiene como objetivo poner en relieve los riesgos para la salud asociados al comportamiento y, además, concientizar sobre cómo este retail industrial compromete el desarrollo sostenible de todos los países.
En esta oportunidad, se celebrará este miércoles 31 de mayo, como cada año, bajo el lema de “El tabaco, una amenaza para el desarrollo”. La fecha es impulsada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), con el fin de reducir el consumo y la cantidad de muertes por año.
A nivel local
En el marco de la semana del tabaquismo, el hospital Lucio Meléndez, sito en Juan Domingo Perón 859, programó una serie de actividades destinadas a la concientización de la comunidad.
Este miércoles, se llevará a cabo un taller abierto a la comunidad con la proyección de un video en la sala de espera del nosocomio; mientras que el jueves 1° de junio, de 10 a 12, se realizarán coxometrías en el Centro de Diagnóstico con alumnos de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y la Dra. Calabrese (neumonóloga).
En tanto, el sábado 3 fumadores y ex fumadores se enfrentarán en un partido simbólico en la cancha de fútbol del Hospital Jorge, ubicado a metros del emblemático hospital. Será desde las 10.
El lunes pasado, desde las 8:30, se desarrolló un curso de capacitación sobre el “Abordaje del tratamiento del tabaquismo”. La charla se desarrolló en SAMI SALUD, y estuvo a cargo del Dr. Konfino.
Se trata de una de las mayores amenazas para la Salud Pública y atenta contra los sectores más vulnerables: casi el 80 por ciento de los más de mil millones de fumadores que hay en el mundo viven en países de ingresos bajos o medios, donde es mayor la carga de morbilidad y mortalidad asociada al tabaco.
Pese a que en Argentina su utilización se encuentra limitada en espacios públicos o privados cerrados e incluso en algunos al aire libre; es un flagelo que afecta tanto a fumadores activos como pasivos.
Es que la emanación de este producto contiene más de cuatro mil productos químicos que son liberados en el aire; de los cuales al menos 250 son nocivos, y más de 50 causan cáncer. Por eso, no hay un nivel seguro de exposición al humo de tabaco ajeno.
El cigarrillo mata a más de 7 millones de personas cada año, de las que más de 6 millones son consumidores del producto y alrededor de 890 mil son no fumadores.
El humo ajeno es el principal causante de graves trastornos cardiovasculares y respiratorios, en particular coronariopatías y cáncer de pulmón en adultos. Entre los lactantes, puede generar una muerte súbita; y en las mujeres embarazadas ocasiona bajo peso ponderal del recién nacido.
En Argentina, el tabaco es la segunda sustancia psicoactiva más consumida, luego del alcohol y la más consumida por jóvenes de 25 a 34 años, según el último informe epidemiológico difundido por el Observatorio Argentino de Drogas, perteneciente a la Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y Lucha contra el Narcotráfico (SEDRONAR).
Asimismo, el relevamiento comprobó que la cantidad y la intensidad de consumo son mayores en varones y se incrementan con el tiempo, junto con el riesgo de vida. De esta manera, los consumidores que mueren prematuramente privan a sus familias de ingresos, aumentan el costo de la atención sanitaria y dificultan el desarrollo económico.
La ley
En 2011, se promulgó la Ley 26.687 Anti tabaco que prohibió el uso del cigarrillo en espacios cerrados, transporte público, centros de enseñanza, entre otros recintos destinados al acceso público o privado.
“Los no fumadores tendrán el derecho de exigir al propietario conmine al infractor a cesar en su conducta”, detalla la normativa. Sin embargo, sólo el 18 por ciento de la población mundial está legalmente protegido.