Robos, destrozos e incendios son las modalidades más habituales. En general, no se trata de delitos planificados sino al azar. En lo que va del año, 111 establecimientos de la provincia denunciaron haber sido asaltados. Un atentado a la educación.
La ola de violencia contra escuelas en Buenos Aires no cesa. Brown no permanece ajeno, ya que en los últimos dos meses delincuentes ingresaron en al menos tres establecimientos educativos del distrito, los cuales se suman a los 266 hechos que ya se registraron en 2017.
Según las cifras difundidas por el Ministerio de Seguridad bonaerense, en lo que va del año se denunciaron 111 robos, lo que supone uno cada dos días. Y si se le añaden las causas por daños, hurtos e intimidación pública, suman 266, más de un ataque por día.
Desde la cartera indicaron que, pese al recrudecimiento de los últimos meses, las cifras muestran una leve baja respecto al 2015 cuando hubo 181 asaltos y 441 actos de vandalismo.
Entre enero y agosto de este año se notificaron casos también en Quilmes, La Plata, Bahía Blanca, Balcarce, Campana, La Matanza, Morón, Florencio Varela, Tigre y Moreno.
Modus operandi
Respecto a las características de los sucesos fuentes del organismo especificaron que, por lo general, los responsables son agresores que viven en los mismos barrios de los edificios escolares porque saben con exactitud dónde buscar los objetos de valor. A veces, incluso, son ex alumnos.
Además, se observa que la mayoría de los casos “no hay bandas delictivas que se dedican a esto, sino que simplemente son robos buscando algún bien para revender”. Suelen atacar centros educativos situados en zonas humildes.
Los principales afectados resultan ser los niños, debido a que se pierden días de clase porque los destrozos son totales. En la mayoría de los episodios, la forma de actuación es similar: ingresos nocturnos forzando puertas o ventanas, roturas de gran magnitud y robos de objetos de escaso valor económico.
Escenario local
Esta semana, delincuentes ingresaron a la escuela N75 de Don Orione. El botín fue: equipos de sonido, un freezer y electrodomésticos, que se utilizan en el comedor escolar que funciona allí y demás elementos primordiales para la enseñanza.
Días antes, intrusos violentaron por quinta vez el ingreso del Jardín de Infantes N° 937 “Puerto Argentino” y de la Escuela N° 17 “Mariano Moreno” de Malvinas Argentinas. Como se llevaron una bomba de agua, entre otros elementos, la dirección debió cancelar el dictado de clases.
Hace un mes, un grupo incendió dos salones de la Primaria N° 23 de Glew. Antes de prender fuego se apoderaron de varios materiales educativos y huyeron.
En la escuela N°70 de Don Orione, jóvenes rompieron el mobiliario de al menos dos aulas y el kiosko del lugar. Como al escuchar ruido los vecinos llamaron al 911, la policía pudo detener a tres de los implicados antes de que pudieran escapar. No obstante, como eran menores horas después se los liberó.
