Los senadores bonaerenses aprobaron el proyecto que busca combatir este flagelo y hoy fue promulgada la ley. Funcionará en todos los ámbitos educativos. Comenzará a regir desde el próximo ciclo lectivo.
Tras la autorización del Senado provincial se creará en el ámbito bonaerense la iniciativa “Ni una Menos”, que tendrá que formar parte de las currículas en todos los niveles educativos. El objetivo es concientizar sobre esta problemática que se cobra vidas diariamente.
La norma, que fue ideada por el Poder Ejecutivo, implica la realización de cursos obligatorios en los institutos, escuelas y también abarcará a los futuros matrimonios desde el 2016. Tomará como base los conceptos de perspectiva de género y derechos de las mujeres.
El fin es promover hogares libres de violencia y supondrá la realización de jornadas especiales la primer semana de junio, de cada año. En su fundamentación se explica que “la violencia de género es una violación con respecto a los derechos humanos y el Estado debe dar respuestas”.
La Dirección General de Cultura y Educación será la encargada de diseñar los contenidos que se circunscribirán en todos los niveles de enseñanza. Mientas que, todas las parejas que soliciten contraer matrimonio, deberán capacitarse, en forma virtual o presencial; a través de módulos que elaborará la Dirección Provincial del Registro de las Personas.
La disposición solicita además a los municipios, colegios profesionales y asociaciones profesionales y sindicales que adhieran a la ley.
El programa “Ni una menos” toma su denominación de la multitudinaria movilización contra de la violencia de género que se concretó el 3 de junio en distintas ciudades argentinas para protestar contra los femicidios y la violencia. En esa oportunidad, Almirante Brown también se sumó a la campaña.
Una larga lucha
Históricamente, innumerables situaciones pusieron en evidencia la subordinación de género femenino. Con la meta de revertir la desigualdad y la discriminación, las mujeres se han organizado y han llevado a adelante diversas luchas en pos de la conquista de sus derechos.
Por eso, al hablar de violencia necesariamente hay que hacer referencia a la discriminación que implica toda distinción o exclusión que tenga por objeto menoscabar o anular el reconocimiento de ciertas libertades fundamentales vinculadas a las esferas políticas, económica, social y cultural.
Este panorama requiere, en primer lugar, la toma de conciencia de lo ocurre y en segundo, medidas concretas para su extirpación del seno de la sociedad.
La igualdad de género supone dar igual tratamiento para mujeres y varones en las leyes y políticas; igual acceso a los recursos y servicios dentro de las familias y comunidades. Pero, solamente será posible siempre que la violencia sea combatida.