Los dueños de bares y confiterías expresaron su aceptación a la iniciativa; mientras que los vecinos demuestraron su solidaridad pagando anticipadamente una bebida caliente para quienes no pueden hacerlo. La campaña comenzó a funcionar tras la propuesta del concejal Mario Fuentes junto a la ONG Compromiso Ciudadano. Se adhirieron locales de Adrogué, Burzaco y Claypole.
“Verdaderamente la iniciativa está teniendo muy buena recepción en todo Almirante Brown. Creemos que es fundamental la ayuda al prójimo y que aquellos que no tengan la posibilidad de comprarlo, una mano solidaria lo pague por él. La verdad esta idea del café pendiente es una gran iniciativa y demuestra la gran solidaridad y la confianza por supuesto de los vecinos. Estamos sorprendidos por la positiva repercusión del proyecto”, expresó el propietario de Filomena Bar, Matías Mozo, en diálogo con deBrown.com.ar.
“Un café pendiente” es una campaña solidaria basada en la confianza. Se trata de que una persona pueda abonar por adelantado un café -o una chocolatada- a personas en situación de calle, que no cuentan con el dinero para comprar una taza de bebida caliente. En Almirante Brown, ya comenzó a implementarse producto de una iniciativa presentada por el concejal Mario Fuentes junto con la ONG Compromiso Ciudadano. Los locales que ya se comprometieron con la causa son: “Filomena”, “Lola Bar” y “Tempo”, de Adrogue; y “El Carguero”, de Burzaco; y el “Bar Pichón”, de Claypole.
En la misma sintonía, el propietario de "Bar Pichón", Ezequiel Arrese, remarcó “la importancia del proyecto en Almirante Brown y lo esencial de la ayuda al prójimo”. “La verdad me llegó la propuesta a través de la ONG Compromiso Ciudadano y la estamos implementado porque creemos en la satisfacción tanto de la persona que viene a tomar su café de dejar otro pago y la alegría de aquel que no podía pagarla de tener la oportunidad de poder tomar esa taza caliente que iba a ser imposible de otra forma. Estamos muy entusiasmados”, completó.
La campaña invita a realizar una acción solidaria, sin fines de lucro. Cada cliente que ingrese a los comercios adheridos, y después de consumir su café, podrá dejar pago otro para quien lo necesite. Este simple procedimiento está teniendo una excelente repercusión en los vecinos que no tardaron en sumarse.
Facundo, un trabajador jubilado de José Mármol, cuando tomaba su café con leche de la tarde en Lola bar comentó a debrown.com.ar " me parece una idea fantástica, estoy muy contento que se pueda desarrollar en nuestro pueblo, me alegra y me da mucha paz que existan autoridades que tengan este tipo de inquietudes ypropuestas y también que tengamos comerciantes que asuman con hidalguía esta propuesta y la lleven a cabo desinteresadamente" . "Estamos bien rodeados y rumbeados entonces" agregó.
La verdad nos encanta esta propuesta que se está haciendo en muchas partes del país y, sobre todo, que haya llegado a nuestra ciudad, que se destaca por la gran cantidad de bares y restaurantes”, expresó Mabel una vecina de Adrogué mientras merendaba en Filomena.
“Es muy importante que aquellos que siempre pasan por las puertas de estas cafeterías hoy tenga-gracias a la solidaridad de la comunidad- la oportunidad de entrar y hacer suyo una rica merienda o desayuno. Estamos contentos y vamos a sumar nuestro ‘café pendiente’”, concluyó en diálogo con este medio.
Historia de “Café Pendiente”
La iniciativa comenzó hace alrededor de cinco años en Nápoles con el nombre de “Caffe Sospeso” y con la difusión que hoy permiten las redes sociales, llegó a la Argentina. Actualmente, se está practicando en distintas ciudades de las provincias de Córdoba y Buenos Aires, en la Ciudad Autónoma; y ahora también en Santa Fe y Santo Tomé.
Los impulsores a nivel nacional explicaron que “este es un proyecto basado en la solidaridad y en la confianza”. “Queremos que todos los espacios puedan brindar esta ayuda solidaria y en los espacios que por diversas razones no puedan alojar personas en situación de pobreza o calle, pueden servir el café en un vaso descartable, pero que lo ofrezcan”, remarcaron.
En tanto, cada espacio gastronómico es libre de poner sus reglas o limitaciones, siempre y cuando cumpla con el compromiso solidario asumido y lo comunique tanto a los compradores como a los consumidores.
“Existen infinidad de posibilidades, variantes e ideas para realizar este proyecto y estamos dispuestos a ayudar a difundirlas. Se puede descargar en la Web toda la información y los elementos necesarios para poder implementar “Café Pendiente” en cualquier parte del mundo”, completaron.
Para más información ingresar a http://sol975.wix.com/cafependienteok