Los argentinos modificamos nuestras actividades cotidianas e implementamos nuevos hábitos. Conocé qué pasará cuando todo termine.
Cruzamos los cien días de aislamiento y entramos esta semana en una nueva fase más flexible. Es entonces cuando comenzamos a vislumbrar el final de la cuarentena y preguntarnos sobre los cambios que nos dejará esta experiencia una vez concluida.
Como todos sabemos, la aparición del virus provocó que la vida de los argentinos se altere por completo y deba reinventarse. Teletrabajo, reuniones por Zoom, clases a distancia, delivery y redes sociales forman hoy parte de nuestro vocabulario cotidiano.
“Ser seres sociales hace que suframos mucho no poder acercarnos a la otra persona. Por eso, es importante mantener el vínculo a través de la palabra. Es la manera de sentirnos contenidos hacia ese afuera que nos da la fuerza para seguir desarrollándonos en los distintos ámbitos. La palabra es el mejor motor para ayudarnos”, explicó la socióloga Romina Paoloni, en diálogo con www.deBrown.com.ar
El Covid-19 no sólo modificó nuestras actividades diarias, hábitos de higiene y prevención en materia de salud, sino que potenció la solidaridad y el sentimiento de empatía.
“Vemos muchas actitudes así. Mamás que hacen barbijos sin ser costureras; otras personas que se ofrecen para comprar productos para los abuelos o hacer algún trámite. También están quienes colaboran con tareas virtuales”, explicó la profesional a este medio.
Destacó además que se logró despertar una mayor conciencia con respecto al medio ambiente. Es que las restricciones aplicadas al transporte terrestre, la cancelación de vuelos, el cierre de fábricas y comercios han causado un impacto positivo.
“Aprendimos a tener en cuenta los errores relacionados con el poco cuidado de la naturaleza. Es decir, respecto al trato que nos damos nosotros mismos y al medio. Esto nos alerta a futuro a tener una mirada no tan centrada en lo económico sino más espiritual y más profunda de lo que tenemos que transitar en este mundo. Hay mucho por aprender”, explicó.
La Lic. Paoloni indicó que perdurarán las medidas de higiene y la naturalización en los más niños sobre la importancia de esta cuestión. También habrá una valoración de todas aquellas pequeñas cosas que antes podíamos desarrollar libremente y ahora esta pausa no los impide.
“El abrazo, el beso o una caricia se van a tomar de otra manera, con otro significado. Finalmente, vamos a poder regalar amor. Tenemos que pensar que esto es transitorio, y no perdernos dentro de ello. Va a pasar pronto y vamos a salir fortalecidos”, destacó.
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— Noticias De Brown (@debrownweb) July 16, 2020
