Cuestiones de identidad y formas de elección de los candidatos separan a los dirigentes de la UCR y los del FAP. El radicalismo pretende una alianza electoral más amplia, que elija sus candidatos a través de las PASO; mientras que el Frente Progresista se niegan a modificar el nombre utilizado en 2011 y pregonan una lista común con representación de las fuerzas aliadas. El tesorero de Comité provincial de la UCR, Mario Helfenstein, admitió en diálogo con De Brown que “las reglas de juego entre ambas fuerzas políticas son diferentes”.
Los acuerdos entre las fuerzas políticas que quieren enfrentar el fuerte peso del kirchnerismo en la provincia de Buenos Aires se tienen que definir cuanto antes. Es que, al establecerse los plazos finales de las elecciones primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) y generales, las alianzas tiene tiempo hasta el 11 de junio para presentarse.
En este marco, la alianza electoral que pretende conformar la Unión Cívica Radical (UCR) con el Frente Amplio Progresista (FAP), que en primera instancia la definieron como “un acuerdo entre fuerzas progresistas con coincidencias programáticas”, comienza a estar en cuerda floja y las búsquedas de la conformación de una única lista de candidatos se complica.
Mientras que desde el radicalismo se pretende definir los representantes de la lista electoral a través de las PASO y que el voto popular defina qué candidatos serán los que llegar a las elecciones generales, desde el FAP buscan incluirlos a su frente y “ampliarlo” manteniendo su identidad.
DeBrown.com.ar puntualizando en los focos de conflicto, dialogó con el tesorero del Comité provincial del radicalismo, Mario Helfenstein, quien admitió estos desacuerdos y explicó: “Se trata de diferentes reglas de juego que tiene cada fuerza política”. Es que las ambiciones del frente progresista apuntan a agrandar su espacio, pero se rozan con la búsqueda de protagonismo e identidad del partido centenario. D esta manera se acentúa el cortocircuito en el acuerdo.
“Desde la UCR somos optimistas en el avance del acuerdo pero aún estamos discutiendo si nos ponemos de acuerdo de utilizar las PASO para legitimar los candidatos de esta lista, porque creemos que la definición de las primarias es fundamental, pero por ahora no lo resolvimos y eso nos están trabando en el acuerdo”, admitió el dirigente radical.
Asimismo, aseveró que otro punto a resolver por esta posible alianzam es en la identidad que quieren asegurarse dichas fuerzas políticas, El radicalismo se niega a ser “absorbido” por el FAP, desde donde buscan integrarlos a su frente y no dejar su denominación.
“No vamos a dejar de ser la UCR, queremos dejar en claro que no vamos a ser a partir de ahora el FAP. Si llegamos a un acuerdo vamos a conformar otro nombre que integre a todas las fuerzas de este nuevo espacio”, enfatizó.
Respecto a la situación de Almirante Brown, el escenario es similar. Existen conversaciones pero aún no hubo un encuentro institucional ya que están esperando que se concrete a nivel provincial y “de prosperar esto se va a dar en Brown”.
Frente a algunas muestras de desacuerdo de sectores del radicalismo browniano, Helfenstein aceptó en declaraciones a este medio que “hay algunos rechazos a nivel individual”, pero aseguró que respetan el mandato de la Convención provincial que definió como parte de la política buscar acuerdo con las fuerzas afines.
Por último, se adelantó frente a la posibilidad de no acordar y aseguró: "Eso ya no sería responsabilidad del radicalismo". “Nosotros estamos dispuestos a este acuerdo y nuestra determinación es conformar una alianza, por eso ahora depende de las otras partes concretarlo”, completó.