La falta de controles en el embarazo y las fallas del sistema, son los principales factores que provocaron 123 muertes de madres, durante el 2015. Representa un aumento con respecto a las 83 acontecidas dos años antes. ¿Cuál es la incidencia de la violencia obstétrica?.
El ministerio de Salud bonaerense informó que entre 2013 y 2015 crecieron los fallecimientos en un 43 por ciento. Frente a ello, inició la campaña “Cada vida cuenta”, para pedir la colaboración del personal sanitario para concientizar y accionar sobre las causas.
La cartera sanitaria provincial relevó el escenario y comprobó el incremento en las estadísticas de mortalidad materna. Por este motivo, diseñó un nuevo sistema de vigilancia que obliga a los hospitales a notificar cada caso en no más de 72 horas.
Según difundieron a través de un comunicado, los decesos de mujeres durante el embarazo, parto y puerperio se acrecentaron un 43 por ciento entre 2013 y 2015 al pasar de 86 a 123 muertes. En tanto, este año ya se registraron 16 muertes más.
El nuevo método ideado por el organismo fue creado por la Resolución Ministerial Nº 0001. Entre sus fundamentos obliga a los hospitales públicos y privados de Buenos Aires en los que ocurra una muerte materna, a notificar el hecho dentro de las 72 horas posteriores a la defunción de la mujer.
Un equipo técnico del ministerio asistirá al establecimiento para efectuar un análisis del caso, junto a los médicos que atendieron a la paciente. El propósito de definir un plan de acción es prevenir que, a futuro, se repitan los motivos.
En 2014 se registraron 314 muertes maternas en el país. Junto a Venezuela y República Dominicana, Argentina es una de las tres naciones de la región de las Américas que no alcanzó el Objetivo de Desarrollo del Milenio de las Naciones Unidas, que consistía en reducir un 75 por ciento la mortalidad entre 1990 y 2015.
Según la Organización de las Naciones Unidas, “cada día mueren aproximadamente casi 830 mujeres por causas prevenibles relacionadas con el embarazo y el parto”. Entre ellas, las adolescentes y jóvenes tienen más riesgo de padecer trastornos durante ese periodo.
Entre los padecimientos que provocan los hechos más graves se encuentran:
Un mal silencioso
El Observatorio de Violencia Obstétrica de Las Casildas, desarrolló la primera encuesta sobre el alcance de este flagelo en la Argentina. En ella reveló que el 70 por ciento de las mamás dijeron haber sufrido agresiones durante el lapso previo y posterior al parto.
La violencia obstetricia supone prácticas que incluyen frases desvalorizantes, amenazas y hasta golpes. Implica lo verbal, psicológico y físico.
Ante este escenario, la Organización Mundial de la Salud recomienda a los agentes sanitarios: “Enfocarse en las necesidades de cada mamá y desalentar el sistema que intenta alcanzar una tasa determinada de partos, lo cual coloca a las mujeres y a sus bebés en riesgo de problemas de salud a corto y a largo plazo”.
