Investigan si se trata de un arma que Spirito, la víctima, tenía a la venta en Internet. Entre los artículos secuestrados en la vivienda del detenido, había más de 20 armas de fuego. Los investigadores intentan determinar si el proyectil salió de alguna de ellas.
Nelson Spirito, de 50 años y vecino de Adrogué, fue asesinado a sangre fría el domingo. La casa en la que convivía con su madre, ubicada en el cruce de Amenedo y Martín Rodriguez, fue la escena del crimen.
La víctima era un abogado retirado. Sus restos fueron encontrados por su hermana en el garaje, luego de escuchar la detonación. Todo ocurrió el alrededor de las 10, en las cercanías de un frecuentado supermercado de la zona.
De acuerdo al informe realizado por los médicos de la Policía Científica, el disparo fue efectuado con un arma de bajo calibre. Además, precisaron que el cuerpo presentaba una herida de bala con orificio de entrada a la altura del lóbulo occipital izquierdo.
Sin embargo, no hallaron el orificio de salida. La bala se alojó dentro del cráneo, según estiman y deberá confirmarse en la autopsia. Ahora, los especialistas intentan establecer de qué arma provino el balazo letal.
El principal sospechoso del crimen es Facundo Nahuel López, de 18 años. Cayó en la casa de un amigo, a pocas cuadras de su domicilio de la calle Ruíz de los Llanos al 3200, en Laferrere, partido de La Matanza. Allí se realizó el primer allanamiento.
Los efectivos le secuestraron 11 armas de fuego; carabinas; escopetas; 13 armas de puño; fusiles de fogueo y aire comprimido; y una ballesta. Además, 150 cartuchos de escopeta; 721 cartuchos de armas de puño; seis garrafas de gas comprimido y dos mil balines de aire comprimido.
La Justicia intentará definir el motivo del Homicidio. Por el momento, la hipótesis que se maneja es la de un ajuste de cuentas, pero no se descarta que el accionar de López estuviera impulsado por el robo de las armas y las municiones.
La Justicia constató además que Spirito y López habían estado en contacto a través de Whatsapp desde el 1° de enero con el objetivo de concretar una venta. Es que después de su retiro, la víctima había comenzado a incursionar en el comercio de artículos por internet.
Según esos diálogos, el sospechoso se autoproclama como “cobrador de deudas”. “Te deben, no sé, 25 mil pesos por lo que sea, te deben plata, me llamás a mí, me decís quién y me encargo de que devuelva lo que debe, simple”, escribió López el 3 de enero pasado.
En tanto, las pesquisas establecieron el agresor buscaba realizar una compra por artículos de camping; pesca y rifles de aire comprimido a muy alto costo. Se estima que de más de 200 mil pesos.
Interviene en la causa el fiscal Marcelo Domínguez, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 5 de Lomas de Zamora.