El objetivo de asegurar la sustentabilidad y redireccionar la ayuda económica a quienes realmente lo necesiten. El proceso será gradual. La facturación llegará a los hogares de manera mensual.
A pesar de que se priorizará la recomposición de las tarifas de los servicios de luz, en función de la emergencia decretada por la situación crítica que enfrenta el sistema, también las modificaciones alcanzarán al gas natural. Habrá revisiones periódicas.
Desde el Ministerio de Energía y Minería informaron que en febrero entrará en vigencia el nuevo cuadro tarifario, que se empezará a abonar en marzo. “La intención es que los pagos sean mensuales para poder controlar el consumo, viendo cuál el impacto que tiene en el bolsillo de cada uno”, destacó su titular, Juan José Aranguren.
Según lo establecen los marcos regulatorios, los entes que controlan el sector, el ENRE y Enargas, deben establecer cada cinco años las tarifas. En función de ello, el gobierno nacional pretende fijar nuevos precios con el fin de que se optimice la prestación.
Febrero es el mes elegido para aplicar estas medidas. Se tratan básicamente de una quita de subsidios que apuntan a que los consumidores porteños y bonaerenses abonen un monto similar a los del resto del país.
En el caso puntual de la energía eléctrica, la emisión de boletas será mensual para que la ampliación se sienta menos. Con respecto al gas esto no será fácilmente ejecutable porque el gasto de cada vivienda se mide manualmente y las firmas no tienen aún la capacidad de accionar el control una vez cada 30 días. Por ello, seguirían llegando bimestralmente, pero con dos cupones, para saldar uno cada mes.
“La cultura del ahorro la perdimos hace rato en la Argentina y yo confío en que la recuperaremos, no sólo porque habrá una tarifa que nos obligue hacerlo sino porque en momentos de escasez debemos hacer un uso racional en casa”, valoró Aranguren.
No obstante, comunicaron que habrá una “tarifa social” que beneficiará a los ciudadanos con menos recursos. Para saber a quiénes se incluirá a ese grupo se cruzarán datos de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) y la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).
En ese relevamiento se evaluará “el poder adquisitivo del grupo familiar; la capacidad contributiva al fisco y el nivel de consumo energético del grupo habitacional”. Es que entienden que el mecanismo que definía los valores actualmente es “discriminatorio”, ya que “privilegia a los consumidores de la Capital y el Gran Buenos Aires”.
Desde la Asociación de Defensa de Derechos de Usuarios y Consumidores emitieron un alerta y solicitaron a la población que esté atenta para evitar abusos. En caso de que esto ocurra, explicaron cómo y dónde se debe denunciar.
“El servicio eléctrico dio problemas en todo el 2015, no solo en épocas de alta o bajas temperaturas. Las tres empresas concesionarias: EDESUR, EDENOR Y EDELAP, tienen su sistema colapsado, sin personal ni material, lo cual no puede ser solucionado con incremento de la tarifa ni quita de subsidios”, informaron a través de un comunicado.
En ese punto, explicaron que el crecimiento poblacional y de consumo requiere un serio tratamiento, que debe incluir un cambio legislativo y de las mismas firmas, quienes a su entender, priorizar su beneficio económico.
¿Cómo reclamar irregularidades?