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DEPORTES
viernes 31 de mayo de 2019

La conmovedora historia de “Benja”, el arquero de 9 de Julio de Glew


Nació con una malformación congénita y debieron amputarle una pierna. Hoy, se luce bajo los tres palos del club browniano. Necesita la ayuda de todos para continuar su carrera futbolística. La ONG Compromiso colabora con la difusión de la causa. Conocelo.

Con tan sólo 11 años, Benjamín Cáceres se convirtió en un ejemplo de lucha e inclusión. Es arquero, de los mejores que tiene la Liga Competitiva de Fútbol de Almirante Brown (LIFAB). Desde que nació la vida le puso obstáculos para llegar a su sueño, pero los superó como un verdadero héroe.

"Benja" es mellizo y sufre una malformación congénita en la pierna derecha, por lo que debieron operarlo más de una vez. Se crió con muletas aunque eso no le impidió abrazarse fuerte a su objetivo principal: jugar al fútbol.

En 2017, producto de que la tibia era muy pequeña y en las infecciones estaban afectando al hueso, le quitaron la rótula y desde ese momento cuenta con una prótesis.

Junto a sus padres, tocaron las puertas de casi todo los clubes de la zona, pero ninguno le daba la oportunidad. Hasta que se cruzaron 9 de Julio de Glew. Apenas 4 meses después de pasar por el quirófano, se probó, mostró todas sus condiciones y Jorge Prado junto a Oscar Rodríguez no dudaron en ficharlo.

"Cuando lo ví atajar me quedé con la boca abierta. Cada vez que recuerdo ese momento se me caen las lágrimas. Él es mi inspiración de todos los días para trabajar en la institución", admitió en diálogo con www.deBrown.com.ar Jorge Prado, dirigente y descubridor del pequeño crack.

La historia no termina ahí. Benjamín nuevamente tuvo que pasar por otro momento angustiante. Por sus condiciones la Liga no lo aceptaba, ya que corría riesgo la seguridad de los otros jugadores.

El arquerito no se dejó ganar y, a través de un escrito, conmovió. "Les pido que me den la oportunidad de participar en mi categoría. Si bien no cuento con una pierna, estoy en condiciones como cualquier otro chico", escribió.

Actualmente, gracias a su sacrificio y pasión por lo que hace, desde la categoría 2007 sale a la disputar los encuentros a cancha completa y hasta lo buscan desde otros clubes.

"Él toma todo lo que está viviendo como algo normal, aunque no lo sea. Tiene un gran temperamento y es el líder del equipo", admitió Alejandro Cáceres, su papá, a este medio.

Benjamín tiene un futuro enorme por delante. Nunca bajó los brazos y eso lo convirtió en un ejemplo para cada uno que lo conoce. Atajar lo hace feliz. Su mundo está en la cancha 9 de Julio, ahí donde encontró grandes personas con un corazón gigante.

La lucha del club

Desde la institución pelean diariamente para conseguir una prótesis para que Benjamín pueda hacer fútbol. En la actualidad, cuenta con una pierna ortopédica para caminar, la cual no lo deja jugar con libertad.

Pese a la buena voluntad de la institución, el elemento tiene un costo inalcanzable para cualquier club de barrio ($800.000) y esperan algún tipo de ayuda para poder continuar su carrera como futbolista.

 

Por: Diego Santa Cruz

 

 

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