Se trata de Oscar Terminiello, quien reemplaza a Francisco Rupnik. Los cambios en la cúpula de la Policía Bonaerense se producen a pocos meses de la llegada de este último al distrito y en medio de los reclamos de los vecinos por mayor seguridad.
La Jefatura Departamental Almirante Brown- Esteban Echeverría tiene un nuevo titular. El cambio se da seis meses después de que asumiera el Comisario Mayor Francisco Rupnik, quien desde el pasado fin de semana es reemplazado por el Comisario Mayor Oscar Terminiello.
Rupnik había llegado en noviembre de 2013 proveniente de la Departamental de Ezeiza, y con el mérito de ser conocido como la mano derecha del actual ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Alejandro Granados, intendente de dicho distrito en licencia.
Según trascendió en las últimas horas, a partir de ahora se desempeñará en el mismo cargo, pero en Mercedes. Se desconocen los motivos puntuales de estos movimientos en la cúpula dirigencial de la fuerza, pero se suman a los producidos en varias comisarías locales de la Comuna en los últimos meses.
El jefe saliente aseguró que ya estuvo reunido con Terminiello para ponerlo al tanto de los casos de investigación que él estaba manejando. Asimismo, señaló que "se le informaron las directivas tomadas en cada una de las áreas, a fin de poder avanzar en la resolución de los mismos".
Los cambios se dan tras algunos episodios de inseguridad resonantes que conmovieron a los vecinos de Brown. Uno de ellos fue el asesinato de Marcelo Domínguez, comerciante en Ministro Rivadavia, quien el 15 de mayo fue sorprendido por dos delincuentes cuando se disponía a llevar a su hija más chica a la escuela.
Estos lo acorralaron en su distribuidora cuando estaba por salir, le quitaron el dinero que tenía reservado para el pago a proveedores, además de efectos personales tanto a él como a su hija mayor, que también estaba en el lugar. Al retirarse le dieron una puñalada, la víctima se subió a su camioneta para perseguirlos, pero a menos de una cuadra se desplomó y fue asistido por un vecino, que lo llevó al hospital. Sin embargo, llegó sin vida.
El caso de Domínguez provocó un gran rechazo al accionar policial entre los vecinos, que realizaron marchas y protestas para exigir justicia, a las que se sumaron pedidos similares de gente que padeció otros episodios de inseguridad. Si bien se detuvo a una persona al día siguiente del crimen, los familiares aseguran que esta no es la responsable de matar al comerciante.
El objetivo de ahora en más será, según adelantaron desde la Departamental, reforzar los patrullajes en las zonas en las que se registraron más hechos delictivos en estos últimos meses; y reforzar el contacto con la comunidad para mantener un diálogo fluido, que sirvan tanto para prevenir como para identificar situaciones sospechosas en los barrios.