Después de una temporada magnifica como ayudante técnico de Carlos Ferrer en el Kairat, Nicolás Chietino volvió al país. Hizo un balance y recordó grandes momentos en su localidad. “Tuve un año muy positivo”, aseguró en diálogo con De Brown.
Uno de los grandes protagonistas del 2017 fue Nicolás Chietino. Comenzó como entrenador en las inferiores de San Martín de Burzaco, pero lo culminó en Kazajistán.
Como jugador, el oriundo de Longchamps pasó por España, Polonia y Gibraltar. En su nueva faceta, se desenvuelve como ayudante de campo del “Gallego” Carlos Alos Ferrer en el Kairat de dicho país.
“Lo tuve como técnico en Polonia. Seguimos en contacto y él sabía que estaba en inferiores. Me lo propuso y no dudé en ir porque se cómo se maneja. Trabajar con él es un placer”, contó Nicolás Chietino mano a mano con www.deBrown.com.ar.
Si bien el fútbol kazajo no es uno de los más conocidos, ni de los países más visitados, aclaró que es un lugar fantástico. “Cuando te dicen ‘Kazajistán’ pensás que vas a la guerra y nada que ver. Hay gente maravillosa. Es otra cultura”, explicó.
“A Carlos lo ayudo en todo. Desde lo más básico hasta lo más complicado, entre ellos el análisis del rival, la motivación, charlar y ver situaciones que a él se le puede escapar”, agregó con respecto a su labor.
Tomaron el mando del equipo a mitad de la temporada y fueron lo artífices de una remontada épica. Disputaron 13 encuentros, de los cuales ganaron 12 e igualaron 1. Asimismo, no les alcanzó para campeonar en la liga, quedando a uno de Astana.
Pero no se quedó con las ganas de levantar un trofeo. Es que, en el medio de esa racha, el browniano se consagró de la Copa de Kazajistán. Los hinchas se rinden ante su plan de juego.
“No pensé que íbamos a tener ese rendimiento en el Kairat. Es muy complicado conseguir 12 victorias en cualquier liga del mundo. Los números dicen que se hizo un muy buen trabajo”, analizó en declaraciones a este medio.
El ex Argentinos Jrs aseguró que no esperaba conseguir un título en tan poco tiempo. Por otra parte, confirmó que está feliz por cumplir uno de los objetivos que tenía el club en la temporada.
Pese a haber vivido 14 años en España, donde se desenvolvió como futbolista, Chietino no olvida sus raíces. “Mi barrio es mi esencia y no lo voy a cambiar nunca. Me ayudó mucho, mantener los pies sobre la tierra, conservar la humildad y el recordar de donde vinimos”, aseveró.
Cada vez que puede, el browniano visita Longchamps, ya que su familia se encuentra residiendo en dicha localidad. “Tuvimos la posibilidad de ir a otro lado, pero no lo cambio por nada”, remarcó.
Si bien hizo inferiores en Argentinos Jrs, donde llegó a debutar en primera, también pasó por el club Castelli. “Cuando vengo a Argentina estoy toda la semana metido ahí, porque fue donde me crié”, recordó.
Carlos Alos Ferrer y todo su cuerpo técnico renovó contrato con el Kairat por dos años más. Tras su gran trabajo en los últimos meses, el club kazajo apostó a seguir con el proyecto.
“El objetivo es la liga. La institución lleva 14 años sin ganarla. También buscaremos meternos en la fase de grupos de la UEFA que sería una vidriera muy importante”, apuntó.
Por lo pronto, el 14 de marzo de 2018, Nicolás tendrá nuevamente la oportunidad de levantar un trofeo. Enfrentará a Astana por la Supercopa del país. “Por el torneo le ganamos muy bien y con mucha autoridad”, puntualizó. “El ‘triplete’ sería algo muy lindo de lograr”, concluyó.
