Cayeron 29 -27 frente a Brasil, en el partido definitorio por la medalla dorada. Tras sesenta minutos en los que no se sacaron ventajas, en tiempo suplementario el “Verdeamarelo” marcó el tanto decisivo. El browniano Sergio Crevatín aportó su experiencia.
El seleccionado masculino de handball no pudo darle continuidad a su buen andar y perdió por un resultado ajustado ante el conjunto “Carioca”, en la final de los Panamericanos de Toronto. Los dirigidos por Eduardo Gallardo jugaron un gran partido pero, en momentos decisivos, chocaron con la descomunal actuación del arquero Maik.
Tras un arranque dubitativo en donde le costó entrar en el partido, Argentina acomodó las acciones e igualó el juego en siete, para establecer una paridad que se mantendría en el resto del encuentro. Con una buena defensa y ataques acertados, se fue al descanso con una leve diferencia de 11-9.
En un duelo de dientes apretados y defensas aguerridas, el entrenador Gallardo confió en Sergio Crevatín. El jugador de la Sociedad Alemana de Gimnasia (SAG) de Almirante Brown, fue importante para abrir la última línea rival y defender con intensidad.
En el complemento, los dirigidos por Jordi salieron en búsqueda de la igualdad y lo consiguieron gracias a la buena rotación en ataque. El combinado nacional respondió de la mano de Federico Fernández que anotó ocho goles a lo largo del match.
Tras estar en desventaja, el seleccionado logró la igualdad a segundos de que los árbitros marquen el final, pero con la última bola para Brasil. Tras una jugada que se ensució, a diez segundos de que terminen las acciones, le fue otorgado un penal a los “verdeamarelos”. Sin embargo, el “Negro” García se vistió de héroe para dejar las cosas empatadas e ir al suplementario.
Con la moral arriba, el seleccionado argentino se puso en ventaja y dominó las acciones, pero fue el momento del arquero Maik, que cerró su arco e impidió nuevas conquistas. A pesar de haber sufrir exclusiones, el gigante de Sudamérica se las arregló para sacar una luz de dos goles de ventaja.
Derrota dolorosa para los “Gladiadores” porque hicieron todo para ganar y tuvieron que conformarse con la medalla de plata. Pese a la derrota, completaron un excelente certamen y el año que viene, su segundo Juego Olímpico consecutivo.