El ministro de Seguridad bonaerense admitió el agravamiento de la inseguridad, y aseguró que el punto más caliente de la provincia es el Conurbano. Sostuvo que el próximo año se duplicará el número de policías. También apoyó la iniciativa de deportar a extranjeros que cometan delitos.
La pelea contra la inseguridad es uno de los ejes de campaña de todos los precandidatos presidenciales que aspiran a suceder a Cristina Kirchner. Y Daniel Scioli tiene en Alejandro Granados al hombre encargado de ofrecer mensajes contundentes al respecto. Pero esta semana sus palabras desconcertaron.
Al ser consultado por la prensa, el ministro de Seguridad de la Provincia respondió que “el delito se enfureció”, y al referirse sobre el punto más caliente de la inseguridad en Buenos Aires y no dudó en señalar al "Conurbano". Luego especificó que "la zona del riachuelo es complicada y en el Oeste también hay una realidad difícil".
"Cuando llegué (al cargo), la gran deficiencia que había era la falta de personal; el resto de las cosas, como los patrulleros o las armas, se puede comprar; sin embargo, para formar un policía necesitamos un año, por eso el 29 de noviembre es un día importante, porque vamos a tener 10 mil hombres más”. Aunque quienes critican la política de seguridad bonaerense aseguran que no se resuelve poniendo más policías.
El funcionario garantizó que el año que viene, "donde hoy hay un policía, habrá dos; y donde actualmente hay 100, habrá 200"; todos lucharán contra un delito que, según la visión del encargado de la seguridad, "más que incrementarse, se enfureció, se embraveció".
Extranjeros
El dirigente sciolista se refirió además a la polémica que se generó por la iniciativa kirchnerista de deportar a los extranjeros -en condición legal irregular- que viene a la Argentina a delinquir. Y no dudó en apoyar la propuesta.
"Me parece una locura que alguien del exterior que comete un delito en nuestro país, siga acá. Detuvieron in fraganti a un grupo de colombianos y, como dijo (Sergio) Berni, seguramente hoy están en la calle", argumentó Granados. "A nivel nacional, es muy importante la incidencia de extranjeros en el delito", apuntó.