El Gobierno bonaerense volvió a insistir en el aumento del 15% sin cláusula gatillo y agregó un plus de 6 mil pesos por presentismo. Los gremios calificaron la propuesta de “insuficiente”. Los maestros esperan una nueva convocatoria, a 15 días del comienzo del año lectivo.
La administración de María Eugenia Vidal propuso nuevamente un aumento del 15 por ciento en tres tramos, sin cláusula gatillo, pero con un plus por presentismo a regir en 2018. Los gremios lo rechazaron y pusieron una vez más en duda el comienzo del ciclo lectivo.
La reunión se llevó acabo ayer por la tarde. Allí, los docentes tildaron de “insuficiente”. Piden una recomposición de más de 20 puntos y que se aplique el mecanismo de actualización automática por inflación.
El reclamo es de acuerdo a los índices proyectados para este año por el mismo Gobierno. Es que los sindicatos también tienen presente que el año pasado, cuando el Banco Central había augurado una inflación de entre 12 y 17 por ciento, el indicador se disparó al 25.
Con respecto a la incremento, el titular de Suteba, Roberto Baradel, sostuvo que equivaldría a “625 pesos por cuatrimestre, con los que ni siquiera se puede pagar el aumento de la boleta de luz”.
Y explicó: “Vamos a tener que esperar a noviembre para que se completen los 1.875 totales del 15 por ciento, que no tienen en cuenta la variación por inflación”.
La Provincia subió el pago extra por presentismo que había anunciado días atrás. El premio llegaría a los 6 mil pesos por una asistencia perfecta. Sin embargo, descendería a 4.500 por cuatro faltas; y a 3 mil por ocho.
Además, las autoridades bonaerenses mantuvieron la intensión de recompensar con 4.500 pesos a aquellos docentes titulares que no se adhirieron a ningún paro ni faltaron nunca en 2017. Son cerca de 50 mil.
Según detallaron fuentes oficiales, las faltas por maternidad; donación de órganos; desempeño por mayor jerarquía; vacaciones; profilaxis; ART; citación de autoridad competente; duelo; estudio y violencia de género, entre otras, estarían exceptuadas del presentismo.
Con respecto a este punto, los gremios sabían que el nuevo ofrecimiento iba a estar atado a mejorar la asistencia en las aulas. En tanto, señalaron que “cambiar el sistema de otorgamiento de licencias médicas es responsabilidad de la Provincia”.
La Gobernación planteó un incremento del 15 por ciento en los sueldos, sin cláusula gatillo. De esta forma, se habría elevado el salario promedio de 24.659 a 28.357 pesos; y el de un maestro ingresante (1% de los docentes) de 12.500 a 14.375 pesos.
La medida fue calificada como “provocadora” por los maestros. Sin embargo, en la primera mesa técnica ninguno deslizó la posibilidad de impulsar un paro. De todas formas, el comienzo de clases programado para el 5 de marzo está en riesgo si el acuerdo se dilata.
Asistieron al encuentro el secretario general de Suteba, Roberto Baradel; junto a sus pares de la FEB, AMET, SADOL, UDOCBA y UDA. Participaron el director general de Cultura y Educación bonaerense, Gabriel Sánchez Zinny; el ministro de Trabajo, Marcelo Villegas; su par de Asuntos Públicos, Federico Suárez; y el subsecretario de Política y Coordinación Económica del Ministerio Economía, Damián Bonari.
