Su familia necesita reunir dinero para poder viajar para repatriar sus restos y conocer los datos de la autopsia. Es que a pesar de que les informaron que murió el 5 de diciembre ahogado en el mar, sospechan que fue asesinado.
Rodrigo Amaya, de 25 años y oriundo de Longchamps, vivía desde 2013 en Brasil. El 5 de diciembre perdió la vida en una playa de San Pablo, en circunstancias que aún se desconocen.
El objetivo de la campaña es poder traer su cuerpo a la Argentina e investigar si se trató de un accidente o de un homicidio. Es que recién cuatro días después de lo ocurrido se enteraron, por medio de un amigo, que había muerto.
Desde su entorno indicaron que todavía se encuentra en la morgue del Instituto Médico Legal a la espera de ser retirado. Para eso, deben juntar cerca de 30 mil pesos, cifra muy elevada para ellos, ya que son una familia numerosa y con bajos recursos.
Amaya era artista callejero y residía hace tres años en Brasil, donde se fue con un grupo de amigos. Pensaba regresar a Longchamps para pasar las Fiestas e instalarse nuevamente en el país.
Quienes deseen hacer su aporte se habilitó una cuenta del banco Supervielle a nombre de Aldo Javier Amaya, CBU 0270061820007220290011, perteneciente a la caja de ahorros N° 000722029001061021.