Tenía 4 meses. Murió el año pasado en el hospital Lucio Meléndez, tras sufrir un paro cardiorrespiratorio, a raíz de la falta de alimentación. El fiscal de la causa retiró los cargos, ya que consideró que la familia atravesaba una grave situación de pobreza, los padres sufrían de adicciones y el Estado no los asistió.
Victoria Damiana Villa Mesa, de 28 años, había sido imputada por “abandono de persona seguido de muerte”, luego de que se conociera que su beba de 4 meses había fallecido de desnutrición. La pequeña había sido asistida en varias veces en el hospital Lucio Meléndez de Adrogué, y su madre había sido advertida de la grave situación de salud, pero aún así, sucedió lo peor.
El 9 de junio inició el juicio oral, que se llevó a cabo en el Tribunal Oral en lo Criminal 2 de Lomas de Zamora, a cargo de los jueces Silvia González, Luis Arabito y Rodolfo Lanza. La fiscal de juicio fue Marcela Dimundo.
Los testimonios brindados durante el proceso judicial determinaron que, por la situación de extrema pobreza en que vivía esa familia de Burzaco, que incluía problemas de adicciones que sufrían sus padres y la falta de asistencia del Estado, fue imposible evitar el fallecimiento.
La bebé había nacido con problemas de bajo peso, a consecuencia de faltas de cuidados durante el embarazo y tenía problemas respiratorios, que había experimentado desde sus primeros días de vida. Esto llevó a la fiscalía a retirar los cargos, pedido que fue avalado por los jueces.
Los informes médicos y ambientales fueron determinantes para que el fiscal decidiera retirar la acusación. “La mujer vivía con su padre, ambos con gravísimos problemas de adicción, en una pequeña vivienda en Burzaco, junto a sus dos hijas de 10 años y 4 meses, y dos hijos, de 6 y 3 años”, detalló el texto. Todos los niños presentaban, en distintos grados, problemas de desnutrición y otras enfermedades.
El médico que realizó la autopsia sostuvo que la criatura necesitaba, imperiosamente, vivir en un lugar con “higiene adecuada, calefacción y ventilación”. Conociendo los informes de la situación socio-ambiental en que vivía la menor, el especialista reconoció que en esa casa “no podía tener cuidados especiales para evitar el final que sufrió”.
La causa fue archivada y la mujer quedó en libertad. Ahora, vivirá en la casa de su hermana, quien se hará cargo de los niños. Además, según especificaron los magistrados, deberá comenzar un tratamiento para superar las adicciones.
