Así lo admitió el defensor de Claypole Marcos Gallego en dialogo con De Brown, al referirse a los partidos que el equipo no puede definir. El capitán analizó el andar del conjunto y se mostró confiado en llegar a pelear un lugar en el Reducido.
Tras el empate sin goles frente a Centro Español, el defensor Marcos Gallego enfrentó los micrófonos de www.deBrown.com.ar y analizó: “Se hace muy difícil tratar de jugar con un campo de juego en tan mal estado. En estas circunstancias se presentan partidos cerrados, con imprecisiones y pelotazos”.
Asimismo, detalló que “en esta clase de encuentros, las pocas situaciones que se generan hay que capitalizarlas porque no se sabe si podrán repetirse”. “Nosotros tuvimos cuatro chances claras que, por diferentes motivos, no pudimos anotar y lo terminamos lamentando”, agregó.
Pese a la sequía goleadora, el central afirmó que “el equipo está muy bien” y que “con la manera de jugar que presenta Claypole”, van a ser mas los pleitos ganados que los perdidos. Sin embargo, reconoció que “es hora de empezar a cerrar los partidos para pelear definitivamente por un lugar en el Reducido”.
Al analizar el trabajo de la última línea, Gallego señaló: “Estamos firmes y nos sentimos confiados. Mantuvimos el arco en cero en varios partidos y potenciamos al equipo desde el fondo”.
“Me siento fuerte, estoy bien físicamente y tengo continuidad, lo que hace que me sienta cada vez más seguro”, señaló sobre su rendimiento individual dentro del campo de juego.
En las últimas fechas, el conjunto dirigido por la dupla Javier Silva Giménez- Juan Zicarelli mejoró su desempeño, pero no pudo alzarse con el triunfo. Además, los equipos que lideran la tabla de posiciones, dejaron puntos en el camino que el “Tambo” no pudo capitalizar.
“El partido frente a Centro Español es el claro ejemplo de lo que nos está pasando. Encuentros que hay que cerrar para seguir prendidos, los terminamos empatando y seguimos dejando pasar oportunidades. Un triunfo nos colocaba a dos unidades de entrar al Reducido, pero repartimos y quedamos a cuatro", remarcó en relación al último encuentro disputado.
En tanto, advirtió que "en la segunda ronda, el equipo ya está metido en tiempo de definiciones" y deberá "ser inteligente" para poder alcanzar la meta.
El plantel arrancó el año bajo la dirección técnica de Diego Piñeiro, pero los malos resultados lo sentenciaron. Ya en manos del binomio técnico actual, se vieron obligados a redirigir la estrategia de trabajo.
“Llevo cuatro años en el club y cada entrenador tiene su manera de lleva adelante al equipo. De este grupo de trabajo rescato que son muy motivadores y trabajan en la parte emocional de sus dirigidos”, expresó el capitán.
Pese a las irregularidades y a los inconvenientes, sostuvo que el objetivo del plantel sigue siendo “pelear por ascender”. “Somos consientes de que hay que mejorar, pero no estamos lejos del nivel de los demás”, concluyó Gallego.