Efectivos de Adrogué desbarataron una banda que se dedicaba a cometer “entraderas” y luego se comunicaban con sus víctimas para exigirles dinero por los objetos de valor robados.
Tras varias semanas de investigación, agentes de la comisaría 1era de Almirante Brown detuvieron a cuatro hombres y una mujer. Están acusados de asalto y extorsión. El modo en el que operaban constaba en forzar los ingresos a las viviendas, llevarse artículos de valor y luego extorsionar a sus víctimas. Le exigían dinero para devolverles el botín.
Los detuvieron luego de la denuncia de una vecina de Adrogué, a la que los delincuentes redujeron e ingresaron a su casa, para huir con su celular y las llaves de un Ford Escort, un VW Bora, un Renault Clío y una moto, además de la documentación y joyas.
La mujer expuso que, tras cometido el robo, los ladrones la llamaron desde su propio teléfono y le pidieron dinero para devolverle sus pertenencias. Debía encontrarlos en la Av. San Martín al 800, en San Francisco Solano.
Los policías vestidos de civiles realizaron un operativo para dar con los delincuentes. Con el fin de cobrar la “recompensa”, uno de ellos se hizo presente en un Volkswagen Bora gris, pero al instante se dio a la fuga.
Luego de una persecución, fue reducido por los efectivos San Martín y Donato Álvarez. Se trata de un joven de 20 años, que utilizaba un chaleco antibalas y portaba tres armas: una pistola 11.25, una pistola Browning 9 mm, y otra Bersa Thunder, también 9 mm.
También tenía un handy con el cual monitoreaba las comunicaciones policiales. En otro operativo, fueron detenidos los otros tres integrantes de la banda.