Según reveló un informe del Ministerio de Salud bonaerense, el 63% de los casos se registra en el seno familiar y el diagnóstico resulta clave para orientar a las víctimas. En Brown, se realizarán charlas preventivas y feria de salud con variados stands.
Organizada por la comuna browniana, a través de su Secretaría de Salud así como por la “Mesa de No Violencia” local, iniciaron ayer las actividades conmemorativas por el Día Internacional de lucha contra la Violencia hacia las Mujeres.
Esta martes 25, en tanto, se realizará un nuevo encuentro en Glew. Será a partir de las 9, en la Escuela 31 (Calderón y Cané); y en la plaza del barrio Gendarmería (Calderon al 300).
Las jornadas continuarán el miércoles 26, esta vez en Ministro Rivadavia. Será en el CAPS N° 1, sito en Marconi 594 de dicha localidad browniana. Habrá talleres varios, muestra de afiches y fotos, folclore y obras de teatro, con activa participación de los vecinos.
Datos
Según un informe realizado por la cartera de salud provincial, el 63% de los casos se registra en el seno familiar y el diagnóstico resulta clave para orientar a las víctimas.
En los últimos cuatro años, se registraron 2.630 atenciones por violencia de género y familiar en hospitales públicos de la Provincia. Así surge del relevamiento elaborado por el Programa Provincial de Prevención y Atención de la violencia familiar y de género, creado en 2011 por decisión de la cartera de Salud provincial.
Fueron casi 50 episodios por mes desde que comenzó a tomarse nota de estas situaciones como hechos violentos. “Antes, se anotaban como lesiones, hematomas, quemaduras o traumatismos, es decir como hechos completamente descontextualizados”, explican los especialistas.
Con este primer diagnóstico, “se establecieron acciones directas de prevención y se instaló la problemática en la agenda sanitaria de trabajo como una de las prioridades”. De este modo, en los últimos tres años se capacitaron 16.000 personas, entre miembros de los equipos de salud, promotores sanitarios y organizaciones de la comunidad.
El registro de estos hechos permite visualizar el problema y definir acciones concretas, instalar la prevención como prioridad y actuar de acuerdo con lo establecido por las convenciones internacionales.
Estadísticas
De acuerdo con las cifras de los centros asistenciales públicos, el 86,9% (2.285 casos) de las atenciones sanitarias por episodios de violencia corresponde a mujeres y el 13,1% a varones. El 63% del total de los casos ocurren dentro del seno familiar.
El relevamiento determinó además que hubo un sostenido crecimiento de las asistencias de casos de mujeres de entre 20 y 39 años: en 2010, esa franja estuvo presente en el 77,1% de casos y en 2014 los registros se elevaron al 93,6%.
En las mujeres de esas edades es predominante la violencia física y verbal con un aumento en la combinación de estos ataques con persecuciones psicológicas. El 12,9% de las mujeres asistidas en esta franja de edad sufrieron también ataques de violencia económica.
En el mismo período, pero en la franja etaria de entre 0 y 14 años, disminuyó la asistencia por violencia sexual exclusivamente (en 2010 fue del 78,6% de los casos y en 2014, el porcentaje disminuyó al 42,9%). Se registró un aumento de ataques sexuales relacionados además con violencia física (maltrato, crianza negligente, golpes, etc.) que en el primer semestre de 2014 llegó al 28,6%.
En jóvenes de 15 a 19 años prima la violencia física asociada a la verbal con el 35,7% de los casos. Y el 52,5% de los episodios ocurren en el seno familiar. En esta franja de edad el 1,1% de los casos atendidos refirió padecer situaciones relacionadas con la trata para la explotación sexual.
Un poco de historia...
Aprobado por la Asamblea General de las Naciones Unidas, en su resolución 54/134 el 17 de diciembre de 1999, se celebra anualmente cada 25 de noviembre. La propuesta para que se conmemorara en esa fecha la realizó la República Dominicana, con el apoyo de 80 países de la historia.
En el mencionado país se había registrado el asesinato de las tres hermanas Mirabal, hecho que tuvo lugar el 25 de noviembre de 1960, por órdenes del dictador dominicano Rafael Leónidas Trujillo. Por este motivo, se solicitó ese día, en homenaje a las víctimas.
En 1981 se celebró en Bogotá, Colombia, el Primer Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe, donde se decidió marcar el 25 de noviembre como el Día Internacional de No Violencia contra las Mujeres, recordando el asesinato de las hermanas Mirabal.
En 1993 la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Declaración sobre la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, en la que se definió la “Violencia contra la Mujer”, como: “Todo acto de violencia basado en el género que tiene como resultado posible o real un daño físico, sexual o psicológico, incluidas las amenazas, la coerción o la prohibición arbitraria de la libertad, ya sea que ocurra en la vida pública o en la vida privada. En dicha Asamblea se reconoció que eran necesarios "una clara declaración de los derechos que se deben aplicar para asegurar la eliminación de toda violencia contra la mujer en todas sus formas, y un compromiso de los Estados y de la comunidad internacional en general para eliminar la violencia contra la mujer”.
El 17 de diciembre de 1999, la Asamblea General de las Naciones Unidas designó el 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. La ONU invitó a gobiernos, organizaciones internacionales y organizaciones no gubernamentales a organizar actividades dirigidas a sensibilizar al público respecto del problema en este día como una celebración internacional.
El Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas para la Mujer (United Nations Development Fund for Women o Unifem, en inglés) también observa regularmente la jornada, y ofrece sugerencias para que otros las observen.
En octubre de 2006 se presentó el Estudio a fondo sobre todas las formas de violencia contra la mujer, que demuestra que existen obligaciones concretas de los Estados para prevenir esta violencia, para tratar sus causas: la desigualdad histórica y la discriminación generalizada, así como para investigar, enjuiciar y castigar a los agresores.