San Martín de Burzaco obtuvo su tercer triunfo de la mano de Ledesma. El "Chiqui", que venía siendo suplente, rompió el maleficio con su primer tanto en el torneo. "Cuando toca, hay que demostrar", aseguró en diálogo con De Brown.
San Martín de Burzaco tiene una vida más. Con el triunfo 1-0 ante Cañuelas, abandonó la zona de descenso y también el último puesto de la tabla. El responsable es David Ledesma, un histórico de los últimos tiempos que había perdido terreno en la presente temporada.
El "Chiqui" entró desde el banco para sacarse la mufa y convertir su primer gol en el campeonato. "Fue una alegría enorme. Salimos a la cancha con mucha presión debido a la victoria de Berazategui. Ya no teníamos más margen para el error", advirtió en www.deBrown.com.ar
Trece presencias tiene Ledesma en el torneo. Diez ingresando en el segundo tiempo y tres desde el arranque. "Cuando toca, hay que demostrar. El delantero vive del gol y por más buen partido que haga, nunca se va conforme sin haber convertido", señaló.
En el "Azul" esperan que la reciente victoria sea el puntapié para la levantada. El ciclo de Néstor Ferraresi apenas comienza y tiene el difícil objetivo de torcer un barco que estaba a la deriva. "Es el momento para hilvanar una serie de buenos resultados que nos permitan respirar más aliviados", aseguró.
Y agregó: "Somos un plantel al que todavía le falta conocerse más. Tenemos jugadores para salir adelante y trabajamos cada día para demostrarlo dentro de la cancha".
De cara a la próxima fecha, "Chiqui" analizó el choque ante Sportivo Italiano, uno de los candidatos al ascenso. "Seguramente va a ser durísimo. Ellos tienen un gran equipo y juegan en una cancha grande, que es siempre difícil. Ser inteligentes y aprovechar las chances que tengamos será la clave", adelantó.