Fue identificado como Gabriel Orellana. Tiene 21 años y es oriundo de Glew. Fue detenido en Tucumán. Según trascendió, estaría vinculado a otros hechos de violencia y robos en la zona. Hasta el momento, la principal hipótesis sobre el asesinato es la de un ajuste de cuentas.
Gabriel Orellana está sindicado como el autor material del disparo que mató a Federico Aristimuño. El hecho ocurrió la madrugada del 1° de enero, durante la celebración de Año Nuevo.
Ocurrió en las inmediaciones de una quinta ubicada en Parravicini al 800, en Glew. Según el relato de testigos, unos jóvenes se le acercaron al luchador de kick boxing, mantuvieron una breve discusión con él. Uno de ellos extrajo un arma y le disparó en la cabeza.
Orellana, de 21 años, fue detenido en la terminal de micros de Tucumán cuando intentaba continuar su huida.
Había salido de su hogar el mismo día del crimen para evitar ser capturado. La familia le había comprado el pasaje y abordó el ómnibus en una parada de Burzaco.
El agresor es oriundo de Glew, al igual que la víctima, que convivía con sus padres y una hermana. Es por eso que la Policía trabaja sobre la hipótesis del ajuste de cuentas, ya que -según el relato de testigos- no le robaron nada al joven.
Según trascendió en las últimas horas, Orellana está vinculado a una serie de hechos violentos y asaltos registrados en la zona.
Los peritos confirmaron que Aristimuño recibió un balazo que ingresó por el lado izquierdo del cráneo y le causó la muerte en el acto.