Lo expresó Gustavo Burgos, coach de la Selección Argentina de Taekwondo y sabonim de los brownianos que compitieron en Bielorrusia. Además de ser uno de los cabezas de grupo, también consiguió la medalla de plata en su categoría. “Fue una experiencia impresionante”, manifestó.
Gustavo Burgos es el maestro que todos quieren tener. Planeó su vida alrededor del Taekwondo y, gracias a ello, se convirtió en una de las personas más destacadas del deporte en Argentina. Dejó a facultad para dedicarse exclusivamente a la actividad y hoy es el subcampeón del mundo en Tul 5to Dan y coach.
“En la final perdí con un ruso que ya lo había visto apenas llegamos. Pasamos dos veces, pero el fallo arrojó que el ganador fue él. Algunos jueces me dijeron que el mejor debía haber sido yo, pero a veces la localía pesa”, explicó el sabonim en diálogo con www.deBrown.com.ar.
El oriundo de Rafael Calzada agregó que tendrá revancha en 2018. Por su gran actuación, consiguió la clasificación al Campeonato Juvenil de Veteranos que se realizará en Bielorrusia. Ahí, lo volverá a enfrentar. “Me motiva para seguir mejorando”, aseguró.
“Haber viajado fue una experiencia impresionante ya que nos encontramos con potencias del mundo. Nos bajoneamos con no poder ir a Corea del Norte porque es un país que solo te deja entrar la federación. Asimismo, encontramos un nivel impresionante”, analizó con respecto a lo experimentado en Minsk, la capitán de dicho país que organizó la Copa del Mundo.
Por otra parte, Burgos describió que tan importante es el Taekwondo para su vida. “Me dio mucho física y emocionalmente, el respeto y la disciplina. Prefiero que mis alumnos tengan valores antes que medallas”, reflexionó.
También se refirió a las actuaciones de sus alumnos del Instituto Mu Deuk Kan, quienes consiguieron subirse a diferentes podios. “Me genera satisfacción porque se esfuerzan mucho y son atletas de elite”, resaltó.
Y agregó: “Entrenan todos los días y tienen sus trabajos. Estoy orgulloso de saber que mis alumnos dejaron todo. Se iniciaron conmigo y verlos que ya tienen su nombre y su escuela me pone muy feliz”.
El browniano cierra un año magistral. Tras conseguir el Subcampeonato de Tul 5to Dan y coach, volvió a Argentina con su ascenso a 6to dan. “El apoyo de mi familia es un pilar fundamental. Mis padres fueron a verme rendir como cuando tenía 6 años. Ellos me motivan para seguir haciendo lo que amo”, enfatizó.
Para finalizar, aseguró que Argentina está vista como una potencia a nivel mundial. “Los países nos ven como tal y no entienden como hacemos para que viajar pese a todas las contradicciones. El argentino tiene pasión y competir en el exterior nos enriquece”, concluyó.
