Tienen una sensibilidad auditiva muy alta. Puede ocasionarles desde malestares y desorientación hasta crisis de pánico. Los detalles.
Los fuegos artificiales en Navidad y Año Nuevo se transformaron en una costumbre popular para muchos. Sin embargo, debemos ser conscientes de los riesgos que éstos implican para personas con sensibilidad auditiva, chicos con autismo, abuelos, bebés y hasta mascotas.
Si bien en diferentes municipios, como es el caso de Almirante Brown, se prohibió el uso de la pirotecnia sonora, todavía hay ciudades donde está permitida su utilización y comercialización.
El uso de pirotecnia puede ser una verdadera tortura para quienes sufren TGD y TEA. Es que estas personas tienen los sentidos exacerbados, en particular el oído. ¿Qué puede generarles esta situación?
La perturbación debido a los sonidos fuertes incrementa sus niveles de cortisol. Esto los pone tensos y deriva en conductos estereotipadas y repetitivas. Incluso los lleva a tomar una actitud agresiva.
Otro grupo muy vulnerables y que requiere mucha atención son los abuelos. Ellos podrían no entender que está sucediendo y esto alteraría su sistema nervioso. También, los sacaría de su rutina asustándolos.
Los días festivos los expone a sufrir estrés a causa de los fuertes ruidos y explosiones. Debido a su sensibilidad auditiva pueden entrar en pánico. También padecer conductas poco habituales como escapar sin rumbo y perderse; lastimarse o herir a las personas.
Asimismo, pueden padecer palpitaciones, taquicardia, jadeo, salivación y temblores. Se suma la sensación de insuficiencia respiratoria, aturdimiento y pérdida del control.
En este marco, se aconseja ubicar a las mascotas en un espacio donde estén cómodos. Si es posible hacerlo con sus juguetes habituales, comida, agua y algún sonido con el que estén familiarizados.
Son otros de los grandes riesgos que trae consigo la época de fiestas. Puede deberse a la utilización de pirotecnia casera, imprudencias en su manipulación o simplemente accidentes. Los heridos no necesariamente manejan los explosivos. De hecho, casi la mitad de las personas que lo sufren son espectadores.
En muchos casos, los daños son irreversibles. Por eso, resulta necesario extremar las precauciones y no subestimar los riesgos.
Desde el 2019, en todo el distrito rige la prohibición de la venta de pirotecnia sonora. Se trata de aquella que provoca ruidos mediante detonaciones.
Los vecinos pueden brindar información o denunciar puntos donde se vendan esta clase de fuegos artificiales o aquellos que no estén autorizados. Deben comunicarse al 0800-222-7696.
🎇 Está prohibida la pirotecnia sonora en Brown 👇 #Política https://t.co/p35G6WTtSh
— Noticias De Brown (@debrownweb) December 21, 2020