El Papa Francisco nombró a Jorge Ignacio García Cuerva. Se desempeñaba como párroco de Villa La Cava en San Isidro, donde realizó una destacada obra pastoral. Tiene diálogo directo con la gobernadora Vidal. Emocionado, manifestó que acercará la iglesia a los más pobres.
La diócesis, que abarca los partidos de Almirante Brown, San Vicente, Presidente Perón, Ezeiza, Esteban Echeverría y Lomas de Zamora-, con una población de más 2,5 millones de habitantes y 61 parroquias, tendrá de nuevo dos obispos auxiliares.
A monseñor Jorge Martín Torres Carbonell se le suma ahora el presbítero Jorge Ignacio García Cuerva. Ambos, también con el vicario general, ayudarán en la tarea pastoral que dirige el obispo diocesano, monseñor Jorge Lugones.
Al conocerse la designación del nuevo obispo auxiliar, el titular de la diócesis, monseñor Jorge Lugones celebró la noticia. Junto al auxiliar, monseñor Jorge Torres Carbonell; y el vicario general, presbítero Hugo Barrios, destacaron “la deferencia del papa Francisco".
“Saludamos al nuevo obispo auxiliar, a quien esperamos para caminar juntos hacia una `Iglesia más abierta y cercana a todos, solidaria y samaritana´, según las prioridades diocesanas que tenemos para el trienio 2016-2019”, expresaron. Y agregaron: “La diócesis de Lomas de Zamora ya reza por su nuevo obispo auxiliar”.
Desde Almirante Brown también destacaron el nombramiento. El presidente de ONG local Compromiso Ciudadano, Mario Fuentes, manifestó: “Recibimos la noticia con entusiasmo. Es una alegría la llegada del padre Jorge al obispado auxiliar”.
Señaló que “tiene un enorme compromiso social y realizó una obra muy importante como sacerdote en la Villa La Cava”. “Ahora vendrá a la diócesis de la Región, no tengo dudas que contribuirá en la iglesia abierta, misionera y cercana a los más pobres, como pregona el Papa Francisco”, sostuvo.
Nació el 12 de abril de 1968, en Río Gallegos, provincia de Santa Cruz. Cursó varios años de la carrera de Derecho, que interrumpió para ingresar al Seminario de San Isidro. En 2009, siendo ya sacerdote se graduó de Abogado en la Universidad Católica de Salta.
Realizó sus estudios de filosofía y teología en el Instituto San Agustín, de la diócesis de San Isidro, filial de la Facultad de Teología de la Pontificia Universidad Católica Argentina Santa María de los Buenos Aires (UCA). Obtuvo el grado de bachiller en Sagrada Teología. Es licenciado en Teología, con especialidad en Historia de la Iglesia (2003) y licenciado en Derecho Canónico (2016).
Recibió la ordenación sacerdotal por imposición de manos de monseñor Alcides Jorge Casaretto. Fue en la catedral San Isidro Labrador, el 24 de octubre de 1997. Está incardinado en la diócesis de San Isidro.
Su primera labor fue desde 1997 a 2005 como vicario parroquial en Nuestra Señora de la Cava” en la villa de emergencia La Cava, en Béccar. De 2006 a 2014, fue párroco de Santa Clara de Asís, en El Talar; y de 2014 a la actualidad, párroco de Nuestra Señora de la Cava.
Allí llevó adelante una destacada obra pastoral, que incluyó un trabajo coordinado con el municipio de San Isidro y estableció un diálogo directo y permanente con la gobernadora María Eugenia Vidal.
De 2012 a la actualidad, oficia como vicepresidente primero de Caritas San Isidro. También integró la Comisión Nacional sobre la drogadependencia de la Conferencia Episcopal Argentina hasta 2013.
Es asesor en Derecho Canónico del Obispo y promotor de Justicia en el Tribunal Interdiocesano San Isidro-Merlo-Moreno. De 1998 a 2017, fue delegado diocesano de la Pastoral Penitenciaria. Desde 2007 a 2014, delegado regional de Pastoral Carcelaria; y de 2010 a 2017, representante de América Latina y el Caribe en la Comisión Internacional de Pastoral Carcelaria (Iccppc).
A partir de febrero de 2017 a la actualidad, se desempeña como vicepresidente de la Comisión Internacional de Pastoral Carcelaria (Iccppc).
Asimismo, es miembro del Secretariado Nacional de Pastoral Carcelaria de la Conferencia Episcopal Argentina. Es capellán de unidades carcelarias en la provincia de Buenos Aires y coordinador de la pastoral carcelaria en el Departamento de Justicia y Solidaridad del Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam).
Lo expresó García Cuerva, luego de conocerse la decisión del Sumo Pontífice. “Es muy emocionante lo que me está pasando, gracias a la diócesis de Lomas de Zamora que me recibe”, indicó.
Y agregó: “Voy a aprender a ser pastor junto con ellos, necesito de la gente para poder ser un buen pastor y de la gracia de Dios que me vaya acompañando”.
