Las subas en las tarifas de luz, gas y transporte vaticinan un trimestre complicado en la economía doméstica. Según el Gobierno, el incremento de los precios será del 15%. Sin embargo, desde la Asociación de Defensa de los Consumidores anticiparon que rondará entre el 20 y el 30%.
Con el aumento en los servicios públicos, se anticipa para el 2018 un panorama poco alentador en materia económica. Si bien el Gobierno anunció que la inflación será del 15%, varias consultoras privadas y organismos aseguran que rebalsará el 20%.
Mientras tanto, la capacidad adquisitiva de los trabajadores continúa desplomándose. En 2017, una familia tipo necesitó más de $16 mil para no caer bajo el umbral de la pobreza.
El presidente de la Asociación de Defensa de Derechos de Usuarios y Consumidores (ADDUC), Osvaldo Bassano, indicó que entre el 65 y 70% de los trabajadores tienen un sueldo de aproximadamente $15 mil. Mientras que gran parte del resto de la población no llega a percibir un monto mayor a los $10 mil.
"Significa que existe una gran capa de la sociedad que está ingresando a la miseria económica”, resaltó Bassano, en diálogo con www.deBrown.com.ar.
El aumento que se aplicará este año en los salarios es el principal tema a debatir por los empleados. En primer lugar, el jefe de Gabinete de Ministros, Marcos Peña, anunció que buscarán que las paritarias cierren, en promedio, en 15%. Este número se condice con el porcentaje de inflación que el Gobierno proyectó para este año.
Sin embargo, las cuentas parecen no cerrar. La administración de Mauricio Macri había anticipado una suba de precios de entre el 12 y el 17% para el 2017. Un número más que lejano ya que terminó en 24,8%, según el INDEC.
“Piensan que lo único que puede regir la economía argentina son los bancos y el Fondo Monetario Internacional y, por lo tanto, la inflación no pueda salir más allá de ese límite. Evidentemente, va a haber hambre porque la inflación real no va a bajar de entre un 20 y un 30%”, vaticinó el titular de ADDUC a este medio.
La “cláusula gatillo” fue una de las herramientas que permitió a muchos sindicatos que su salario fuera a la par con los aumentos y fue el elemento que permitió cerrar la negociación. Esto ocurrió en el caso de los empleados bancarios, docentes y trabajadores del petroleo; entre otros. Sin embargo, este año no parece estar en los planes del gobierno.
El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) dio a conocer los últimos números del panorama económico del 2017. Entre esos datos reveló que la Canasta Básica Total (CBT) aumentó un 26,8% durante el 2017.
“La inflación mensual de la canasta alimenticia ronda entre el dos y el tres por ciento mensual. La mayor cantidad de gente tiene una menor cantidad de moneda para poder comer. Evidentemente la inflación para esa gente, que es la de menor recurso, va a ser mayor”, opinó Bassano.
Según reveló el informe oficial, un matrimonio con dos hijos necesitó de un ingreso mayor a los $16 mil para no caer bajo el umbral de pobreza. Mientras que debió percibir un monto de, por lo menos, $6.644 para poder comprar los bienes básicos.
Sin embargo, desde ADDUC discreparon fuertemente con estos números. “Una familia tipo gasta $14.400 para alimentos, necesariamente de primera calidad. Si esa persona debe a su vez pagar luz, gas, teléfono, agua, el colegio de los chicos, medicina prepaga; su ingreso necesita ser de 30 a 40 mil pesos”, explicaron.
Otro de los datos aportados por el informe del INDEC fue que la inflación de la CBT fue mayor que la de la Canasta Básica Alimentaria. El porcentaje varió en un 3,1%. Esta diferencia está relacionado con que se registró una suba del 34,2% en los servicios públicos.
Asimismo, ya el año comenzó con modificaciones en las cuentas públicas. Las tarifas de luz, gas y transporte sufrirán cambios en los meses de febrero, abril y octubre. Estos incrementos van en línea con el plan económico del Estado de eliminar los subsidios en las boletas.
“Toda ecuación financiera está en pos de los proveedores, pero nunca se ponen a pensar cuál es la ecuación financiera del consumidor. Cuánta plata dispone mensualmente para poder adquirir lo necesario. Comer, tener servicios públicos, viajar a sus lugares de trabajo, vestirse. Si ninguna de estas cosas pueden cubrirse al 100%, evidentemente estamos en problemas”, criticó Bassano.
Si bien el INDEC reportó un suba del 20,1% de los bienes, otro de los problemas que plantean desde ADDUC es la diferencia entre los precios de los comercios locales y los grandes supermercados.
“En los barrios, que eso es más del 50% de la población, la leche llega, pero con otro tipo de comercialización porque no son entregadas por cuestiones de seguridad a los almacenes”, explicó a modo de ejemplo el titular de ADDUC. Asimismo, señaló que la variación en el valor del producto es de entre $8 y $10.
“Para la mitad de la sociedad el consumo de alimentos va salir mucho más caro, agregándole la inflación. Si esto sigue escalando, va a generar mayor pobreza y, si a eso le sumas la política económica, estamos en la puerta de estallidos sociales inminentes”, concluyó.
