Así lo informó el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC). Una familia tipo necesitó $6.644 para no caer en la indigencia y más de $16 mil para no ser pobre.
El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) lanzó ayer los últimos datos con respecto al panorama económico de 2017. El informe reveló que la Canasta Básica (CBA) sufrió un incremento del 21,7%. Mientras que la Canasta Básica Total (CBT) subió casi un 27%.
La CBA es la cantidad de dinero que debe percibir una familia tipo para poder adquirir todos los alimentos de primera necesidad y así no caer bajo la línea de la pobreza. El año pasado un matrimonio con dos hijos debió ganar un monto de $6.644,40 para poder subsistir. Esto representa un incremento del 21,7% con respecto al mismo período del año anterior.
Por otro lado, la CBT registró una elevación del 26,8%. Esto significa que un hogar debió tener un ingreso de $ 16.677,44 o más para no ser considerado pobre.
La razón de esta amplia desigualdad respecto al otro conjunto de productos es que aquí, además de los alimentos, se incluyen los servicios públicos como la luz, el agua y el gas.
En 2017, se aplicaron una serie de “tarifazos” que golpearon fuertemente el bolsillo de las familias. La finalidad de los mismos era quitar de manera progresiva los subsidios que las compañías recibían.
Los precios de los bienes subieron 20,1%; mientras que el de los servicios se elevaron 34,2%. Una diferencia abismal que se condice con la inflación del 24, 8% anunciada por el organismo.
