Vecinos de Adrogué denuncian una nueva metodología de robo que se está implementando en verano, cuando las casas quedan vacías. Los delincuentes cortan los cables de luz con el fin de desactivar las alarmas, entrar a las viviendas y desvalijarlas.
Adrogué amaneció empapelada de carteles que advierten sobre una nueva modalidad de robo en Almirante Brown. Según los vecinos, los ladrones interrumpen el suministro de electricidad para ingresar a las viviendas que quedan vacías durante el receso estival.
“Están cortando los cables de luz de los medidores para que deje de funcionar la alarma y entrar a robar”, alertan las leyendas anónimas pegadas en distintos puntos de la ciudad cabecera del distrito.
El alerta circula tanto por Whatsapp como por Internet. En Facebook, más de seis mil habitantes de la zona se encuentran nucleados en el grupo “Adrogué, queremos más seguridad”. Mediante esta red, intercambian experiencias y se avisan sobre eventuales robos. Desde allí, recomiendan no entrar en pánico y comunicarse al 911 ante un apagón sospechoso.
El objetivo es sortear la vigilancia de las alarmas comunitarias instaladas en postes por los vecinos de la cuadra. Son financiadas por cada hogar, y poseen un sistema de numeración que permite identificar de qué propiedad proviene la alerta. Además, ofrecen aviso de sirena, botón de alarma y luces con censor de movimiento.
También aconsejaron verificar la carga de los dispositivos de vigilancia periódicamente. Si la alarma tiene la batería totalmente cargada, puede llegar a tener alrededor de ocho horas de autonomía. Su correcto funcionamiento debe ser chequeado por personal profesional.
