Desde noviembre, la medida de fuerza era llevada a cabo por padres de alumnos del establecimiento, en pedido de que se construya un nuevo edificio. A raíz de una serie de hechos de vandalismo, decidieron finalizar esta acción. Los estudiantes siguen a la espera de que se terminen las obras de las "aulas provisorias" en la primaria N° 37 para poder comenzar las clases.
Después de cinco meses, se levantó la toma que un grupo de padres de la secundaria N°26 de Glew había iniciado para evitar que sus hijos volvieran a las deplorables instalaciones del edificio situado en Scalabrini Ortiz 2165. La decisión se debe a una serie de episodios de inseguridad que se vivieron en el lugar y también a diferencias que surgieron entre quienes llevaban adelante la medida.
“La escuela sufrió cuatro situaciones de robo, cosas insólitas. Entonces, por mayoría, la comisión decidió levantar la toma”, relató a www.deBrown.com.ar Mariela Celiz, mamá de alumnos que concurren a la institución de Villa París.
La mujer aclaró que la actividad había bajado su intensidad, debido a que sólo utilizaban el lugar como punto de encuentro para comunicar las novedades que fueran surgiendo mientras aguardaban a que se terminen de construir las aulas extra en la primaria 37, lugar donde los estudiantes secundarios asistirán hasta tanto tengan su edificio propio. Sin embargo, comenzaron a aparecer disidencias y decidieron darle fin.
“La toma fue siempre pacífica, nunca tuvimos inconvenientes, pero como la situación empezó a cambiar, decidimos retirarnos. Anoche (por el martes) nos enteramos que hay dos padres y dos vecinos que siguen ahí; y que además pusieron un puesto de venta ambulante en la entrada”, precisó la mujer y destacó que esas actitudes “no tienen nada que ver con el reclamo”, que consiste en el pedido de una nueva escuela.
“Hemos decidido esta medida, ya que los alumnos no corren ningún peligro de volver allí: los reclamos están hechos y serán atendidos en tiempo y forma. Por supuesto que seguiremos reclamando hasta que se cumpla todo lo prometido, pero de ninguna manera queremos vernos involucrados, de hoy en más por cualquier acto vandálico en la escuela, mientras tanto esto fue informado y se realizara la denuncia pertinente”, detallaron en la página de Facebook “En Defensa De La Escuela Pública: Escuela 26 villa París Glew”.
La crisis del establecimiento estalló en noviembre del año pasado cuando una parte del patio cedió y formó un gran cráter, que evidenció las fallas estructurales que las autoridades provinciales cubrieron con arreglos provisorios.
Desde entonces, la comunidad educativa comenzó a manifestarse y movilizarse para pedir una vez más que se construya una escuela nueva. Ante el intento de arreglar el edificio actual, a fines de ese mes, un grupo de padres decidió concretar una toma para evitar que avancen esas reparaciones, ya que no estaban dispuestos a que sus hijos volvieran a tener clases en ese lugar.
La medida se extendió durante todo el verano a la espera de que, en una primera instancia, comenzaran a realizarse los nuevos salones en la escuela N° 37, a la cual se derivó el alumnado en aquel entonces para intentar concluir el ciclo lectivo 2014.
Luego de que en enero empezarán a trabajar en la ampliación, si bien continuaron con su accionar, los papás resolvieron utilizar la escuela como lugar de reunión, intercambio de ideas y para comunicar los pasos a seguir. Ahora, esperan que por fin el trabajo concluya porque -a tres semanas del inicio del ciclo escolar en la Provincia-, el alumnado de los seis años de la secundaria aún no pudo comenzar las clases. Según está previsto, la edificación debería estar lista para el miércoles de la próxima semana.
