En su vuelta al Rodolfo Capocasa, cayó por 2 a 0 ante General Lamadrid. Claypole jugó mal y cometió errores defensivos que le costaron el partido. La próxima fecha quedará libre y volverá a la acción en dos semanas cuando visite a Leandro Alem.
Claypole no tuvo una buena tarde y fue derrotado sin atenuantes, de local, ante el elenco de Villa Devoto. En su estreno en el torneo de la Primera D, los dirigidos por Gustavo Galarza se mostraron erráticos en los pases y con fallas groseras en su última línea, que lo privaron de alzarse con la victoria.
En el comienzo de las acciones, ninguno de los dos clubes logró marcar supremacía y se prestaron la pelota sin generar situaciones de peligro. El “Tambero” trató de imponer un juego por abajo, pero la falta de precisión le impidió avanzar en el terreno de manera colectiva.
El “Carcelero” presionó la salida y forzó el error del conjunto browniano, que en ningún pasaje del pleito mostró seguridad en su defensa. Matías González perdió la pelota cerca de su área y Emiliano Mosman estuvo a muy poco de abrir el marcador.
A los 15 minutos, una desinteligencia entre el arquero Sergio Meli y el central Alan Ezcurra, le permitió a Nahuel Torres anotar el primer grito de la tarde. El conjunto browniano acusó el golpe y no mostró recursos para reponerse.
A los 30, en una desafortunada jugada entre Meli y González, que bordeó el absurdo, le dejaron el balón servido a Pablo Ocampo para que defina con el arco a su merced. Los dirigidos por Héctor Balza, sin mostrar demasiado, se encontraron con dos regalos que le dieron la oportunidad de irse al descanso con una diferencia que terminaría siendo definitiva.
Para el complemento, Galarza hizo ingresar al juvenil Roger Núñez, quien le aportó mayor presencia en ataque. La movilidad de Jonathan Ledesma fue lo más rescatable del local, aunque muchas veces no encontró compañeros para asociarse y debió apostar por la jugada personal.
Con el monopolio del balón, el elenco sureño se lanzó en búsqueda de la igualdad, pero careció de ideas para inquietar la valla custodiada por Juan Pablo Ghiglione. Lamadrid se paró de contragolpe y, con mucho campo para recorrer, tuvo varias ocasiones para aumentar la diferencia.
Pese al mal desempeño, Claypole apostó por jugar, aún en sus peores momentos del encuentro. El “Carcelero” mostró oficio para cerrar el partido y sólo debió esperar a que el árbitro Tomás Diulio señale el centro de la cancha para alzarse con los tres puntos.
Mal arranque para el “Blanquinegro” que no pudo festejar en la vuelta a su estadio. Tras un duelo, en el que prácticamente no pateó al arco, deberá corregir errores y encontrar su mejor funcionamiento para generar caminos al triunfo. En dos semanas se trasladará hasta General Rodríguez para visitar a Leandro Alem.
