Se trata de la joven de 19 años, embarazada de cinco meses, que fue asesinada en Glew. “Te arrebataron la vida, mi chiquita. Te sacaron la ilusión de ser mamá”, expresó María en una carta que escribió en su memoria. En la causa hubo un cambio reciente de fiscales y aún se desconocen los detalles de cómo ocurrió el homicidio.
A siete meses del crimen de Ayelén Roldán, la joven asesinada en Glew, su hermana María le dedicó unas palabras. En el texto, manifestó el dolor de la ausencia y solicitó que se condene a los culpables. Hasta el momento, los únicos detenidos son Adrián Aníbal Torres y Natalia Inés Cottone, la pareja propietaria de la casa donde hallaron el cuerpo.
“Cómo me duele tu partida. Con tan sólo 19 años esos malditos asesinos te mataron a vos y a mi sobrinito. Te arrebataron la vida, mi chiquita. Tenías todo por delante y te sacaron la ilusión de ser mamá”, escribió.
La víctima transitaba el quinto mes de embarazo. Ese hecho complicó la situación procesal del matrimonio, que fue imputado por “Homicidio simple en concurso ideal con aborto”.
Por ese delito, los acusados podrían recibir entre 8 y 25 años de prisión. Incluso se los podría castigar con perpetua, teniendo en cuenta la figura del aborto como agravante.
“Me voy a encargar de que se pudran en la cárcel aunque eso no me va a dar tranquilidad porque vos no vas a volver. Ojalá que se haga Justicia, voy a luchar para que tu partida no quede impune”, prometió María a su difunta hermana.
Ahora la familia, que todavía no cuenta con un abogado defensor, espera poder llevar a juicio a los responsables. A esa instancia llegarían dentro de dos años, según estimaron. Es que hubo un reciente cambio de fiscales que “podría demorar el proceso aún más”, explicaron.
Ayelén Roldán fue encontrada sin vida en una vivienda ubicada en Fleming al 3500, en Glew. Según los resultados de la autopsia, la joven falleció por “asfixia mecánica por estrangulamiento a lazo” provocada por un tercero.
Hasta el momento, la coartada que declararon Torres y Cottone sólo se pudo corroborar parcialmente. Además, la primera fiscal que tomó el caso comprobó que habían mentido en su primera exposición ante las autoridades judiciales.
Se trata de un matrimonio que era amigo de la joven desde hace varios años. Según el relato de los propios acusados, ella era la madrina de uno de sus hijos y solían reunirse para cenar o durante las tardes.
Además, Ayelén era la menor de seis hermanos. Era muy unida a su hermana María, sobre todo porque ella le había regalado la dicha de hacerla tía. Sin embrago, la mujer confesó que desconocía muchas sus amistades.
La investigación ahora será llevada adelante por los fiscales Viviana Giorgi y Juan José Vaello, de la UFI 1 de los Tribunales de Lomas de Zamora. Reemplazaron a su par de la UFI 3 María Laura Álfaro, que trabajó en el caso desde un primer momento.
