La medida, que ya fue publicada en el Boletín Oficial, está vigente desde esta semana para consumos de hasta 2.000 pesos, con un máximo de 300 pesos por mes. Son alcanzados por la disposición 6.600.000 personas, entre población pasiva y beneficiarios de planes sociales.
La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), comunicó que el reintegro parcial del Impuesto al Valor Agregado (IVA) es para los sectores de más bajos recursos. Será para compras de productos masivos en comercios de venta minorista.
Se les exigirá a los negocios que acepten a las tarjetas de débito como medio de pago, para avanzar en el reembolso de este gravamen, que será del 15 por ciento para gastos de hasta 2.000 pesos.
Según aclaró la AFIP, la norma alcanza a jubilados y pensionados que cobren la mínima, beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo y Asignación por Embarazo, y quienes perciban pensiones no contributivas nacionales en una suma mensual que no exceda del haber mínimo.
A cada uno de ellos se les acreditará, por cada una de las dos primeras transacciones que realicen, una suma fija 150 pesos; mientras que durante el segundo y el tercer mes dicha adición se reducirá a 75 pesos por cada una de las cuatro primeras compras y a 50 pesos por cada una a partir de la sexta.
Hasta tanto el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) no publique la canasta esencial, el monto máximo será de 300 pesos por mes y por beneficiario. Además, ese valor deberá ser modificado “en función a la variación del precio de alimentos, en julio y enero de cada año, a partir de enero de 2017”.
Por último, el organismo aclaró que se instalarán sin cargo los POS (lector de tarjetas de débito) en los locales y no pagarán por su utilización las comisiones en los primeros dos años de uso, cuando se trate de establecimientos monotributistas o microempresas con ingresos anuales menores a los 9 millones de pesos.